VCF 2 – LEG 1 | Y apareció Soler (el bueno). El VCF consiguió pasar de ronda sin demasiados apuros, aunque en la segunda parte se pudo complicar. Así lo vimos.

Jomi Lavarías

Partido que a priori se presumía de trámite y que fácilmente ha podido no serlo, porque a pesar del empate a uno que ha imperado en la práctica totalidad de la segunda parte, el Leganés bien ha podido marcar el segundo en alguna oportunidad de las que ha dispuesto y haber acongojado a los pocos fieles que han ido a Mestalla y a los muchos que lo hemos visto por tv.

En la primera parte, sin hacer un gran partido, el fútbol ha sido algo vistoso. Fútbol rápido, al primer toque, sin apenas conducciones ni regates, pero con el poso de que se jugaba descontrolado e impreciso. Como cuando conduces un coche mas potente del que estás acostumbrado y sí, vas rápido, pero con sensación de desconfianza. En la segunda parte el Leganés nos ha pegado un meneo. Con muy poquito, por momentos, hemos sido un juguete, casi todos veíamos venir que nos caía el segundo gol.

La conclusión es que hay que pegar un volantazo a esta situación. No sé si la solución es traer 4-5 jugadores, pero hay que tratar de en este mercado de invierno dar salidas y remozar el equipo. Así no podemos seguir.

Muy destacable el partido de Rodrigo. En los primeros 11 minutos podría haber llevado un hat-trick, parecía que iba a ser otra noche negra en su haber, pero al final ha hecho un doblete que espero le sirva para seguir cogiendo más confianza y que siga afinando la puntería. Y Carlos Soler…un oasis en mitad del desierto. Frescura, desparpajo y calidad. Nuestra gran esperanza. Que Prandelli le dé más minutos, por favor. Lo más positivo de la eliminatoria en su conjunto. Y ya de paso, don Cesare, siga mirando al filial. Tiene que haber un central mejor que Santos, tiene que haberlo, es imposible que no lo haya.

En fin, cerrojazo a 2016, uno de los peores años del Valencia en su historia. Que 2017 nos traiga menos penurias y más tranquilidad.

Feliz Navidad a todos y nos vemos en Café Mestalla el próximo año. Amunt!

Drakul

El Valencia ha superado sin ningún apuro la eliminatoria contra el Leganés. El partido empezó con la desilusión de no ver a Lato y Soler en el once inicial, el zurdo siquiera en el banquillo. Fue una decisión comprensible de Prandelli en el caso del nuevo lateral zurdo emergente, ya que ante la baja de Abdennour no tendría demasiado sentido tener dos laterales zurdos en la reserva.

Era interesante ver cómo empezaba a andar el nuevo Valencia sin Parejo, su creador los últimos tres años ya que presumiblemente abandonará la entidad este mercado invernal. Algunos incluso cambiaríamos eso de “presumiblemente” por un “deseosamente”. La primera parte dejó algunas buenas sensaciones. Equipo compacto, que no dejó de buscar en las espaldas rivales a un inspirado Rodrigo que acalló a sus críticos con dos goles y dos balones al palo. También gustó Medrán en sus labores de conector del medio del campo con la delantera.

Tras el descanso todo cambió. Un error táctico grupal en el repliegue mas un error individual de Enzo Pérez en nuestra área, permitía al Leganés empatar el encuentro. Y con ello volvían los fantasmas de la memoria, el desconcierto, el mal juego y las imprecisiones. La entrada de Carlos Soler al campo fue la mejor noticia del día. El chico lo hizo todo bien a nivel individual pero el equipo acusó la ausencia de Enzo y el equipo perdió la suficiente consistencia para haberse llevado algún gol más que metiera el miedo en el cuerpo a la grada. Bueno, a la mayor parte de la grada, la que estaba pendiente del partido.

Arias4ever

Había que pasar de ronda y se pasó. Lamentablemente el equipo volvió a mostrar dos caras; una aceptable primera parte y otra desastrosa durante muchos minutos de la segunda.

El miedo a  encajar un gol temprano del Lega que nos pusiera de los nervios se disipó rápidamente viendo cómo el equipo controlaba la situación. Incluso jugando con cierto criterio, creando ocasiones y sin pasar apuros. Todo ello corroborado con el golazo de Rodrigo cuando se había entrado en una fase de sopor absoluto.

Tras volver de vestuarios el panorama no era el mismo; Machís recorrió todo el campo, porfió por la pelota una y otra vez, no se sorprendió del tremendo error de Enzo y puso las tablas en el marcador.

Y en ese preciso momento vimos al Valencia del 2016; lleno de nervios, superado por el rival, con un run run de fondo en la grada, pitos, pérdidas absurdas, etc. Menos mal que el Lega no hizo el 1-2 en alguna de las ocasiones que tuvo. Posiblemente estaríamos hablando de una eliminación. Solo hubo una buena noticia; la aparición del Carlos Soler.

Todo lo hizo bien, no se dejó  llevar por el lúgubre ambiente que se respiraba, jugó con brillantez y criterio. El canterano  clausuró  su estupenda actuación con un jugadón que merecía terminar en gol y remachó Rodrigo.

Ese Rodrigo que abandonaba el campo abroncado y enfadado por la faltita de las narices. Después de marcar dos goles, dejarse los cuernos en el campo, marcar el segundo estando lesionado. Ese Rodrigo del que se gritan más sus ¿fallos? que sus goles a pesar de ser el máximo anotador del equipo. Ese Rodrigo…

Y poco más; a esperar que acierten con los fichajes y que Prandelli sea capaz de enderezar el equipo. Tarea no le va a faltar al italiano.

Ilustración del artículo vía www.valenciacf.com