Peris

Estuvo cerca. A centímetros. Concretamente los que mide el pie de Navas, sacando el balón a Parejo en la mejor jugada de todo el partido por parte del Valencia. Si hubiera entrado, lo que quedaba de segunda parte hubiera tenido otro guión y, probablemente, otro final. Pero no. Los dos penalties de la primera parte y los dos garrotazos del final dejan un resultado más escandaloso que otra cosa. Como dije con el sorteo de las semifinales de Copa calentito, estos partidos van a medir el nivel de la plantilla, donde ahora el más discutido es Montoya y comienza a ser mosqueante la dinámica de Guedes. Pero bueno, está bien para dar rodaje a Soler usar de sparring al Madrid, que se ha empleado a fondo en Mestalla. Si jugaran así todos los partidos, optarían a la liga. Pero no.

Soler es la buena nueva. El Regreso del canterano es la segunda mejor noticia de la semana. Con él en el campo, Parejo mejora en la creación y las opciones ofensivas se multiplican. Sin duda, un motivo más para el hype copero. Seguimos terceros, sin margen de error ya, pero terceros. Wanda espera. Y antes, para no aburrirnos durante la semana, copa. Vamos a ello, xiquets.


Jomi Lavarías

Dolorosa y demasiada abultada derrota del Valencia esta tarde en Mestalla contra el R. Madrid. El lastre del 0-2 al descanso pesó muchísimo y pese a los intentos del equipo en la segunda mitad, al final el cansancio y la falta de frescura hizo que el Madrid (uno de los peores que se recuerda) se marchara de Valencia con una holgada victoria, de la que hablarán desde la meseta diciendo que su equipo ha renacido cuando la imagen que realmente ha dado es la de un equipo muerto y sin recorrido.

Como no podía ser de otra manera hemos tenido nuestra ración arbitral de cada día. Hoy con más motivo. Nos visitaba el equipo que más ha robado y roba de la historia del, casi me atrevería a decir, fútbol mundial. Si del primer penalti obviamente no se puede decir nada, del segundo sí, y con razón. La ya muy manida historia de que ese penalti en su área y en su estadio no se lo pitan. Y es que es así. Y así hay que decirlo, le moleste a quien le moleste. Y que le moleste a un merengón pues tira que te vas, pero que le moleste a gente de aquí, y supuestamente valencianista, tiene delito. También ha habido un penalti a Gayá del que nadie hablará, una agresión de Ronaldo a Montoya de la que nadie hablará y una primera tarjeta amarilla clarísima a Carvajal que el árbitro «olvida» sacarle al conceder una ley de ventaja que junto a la que le saca minutos habría supuesto su expulsión. Expulsión de la que nadie hablará tampoco.

Hay que levantarse. Hoy es un día especialmente jodido, pero el jueves tenemos otro puerto de montaña en Barcelona y hay que dar la cara por el escudo intentando traer viva la eliminatoria a Mestalla.

Amunt!!


Hoeman

  1. Martín Montoya es una ruina defendiendo cerca del área; no sólo por los dos penaltys cometidos -rigurosos, pero perfectamente pitables, aunque comparando con lo ocurrido en área contraria…- sino porque no sabe defender: siempre tarde, casi siempre mal colocado, y como dice postmoe -no con estas palabras-: físicamente un escombro para la demarcación que ocupa. Ya son demasiados los goles encajados que podemos atribuir a errores groseros suyos. Lo que aporta en ataque (golpea bien, aporta cierta profundidad y participa en combinaciones) no suma en el balance beneficio-riesgo. A Nacho Vidal se le ha matado por mucho menos y teniendo escasas oportunidades. Más vale caer en gracia que ser gracioso: yo creo que es algo que puede pesar a Marcelino y repercutir en la dinámica colectiva, porque los jugadores no son idiotas y saben que Montoya es un agujero negro.
  2. El árbitro, cuando de verdad importaba (tablas en el marcador o perdiendo por la mínima), de nuevo favoreciendo al rival ya sea sin amonestar (faltas tácticas de «licencia para ahostiar» Casemiro, Nacho o Varane), señalando faltas inexistentes (Benzema se desmaya) o no señalando las existentes favorables VCF (Casemiro, as always).
  3. Sensaciones: Neto es un portero que necesita estar activo para rendir mejor. Últimamente su papel, que es parar en las pocas ocasiones en las que se le requiere, discreto.
  4. Sensaciones: Parejo, como nos tiene habituados a lo largo de las temporadas, ha pegado un bajón, y repercute en Kondogbia que tiene que hacer más no sólo en la presión y recuperación, también en la distribución.
  5. Faltó acierto y mordiente, como nos temíamos que podía ocurrir al principio de temporada. En la segunda mitad el Real Madrid estuvo a merced del Valencia durante largos tramos, pero sólo hubo el gol de Mina.
  6. Soler cambió la cara al partido. Para mí, el mejor jugador de la plantilla, es tan bueno que aunque no esté muy participativo, por su mera presencia permite brillar al resto de compañeros -es una vigilancia especial obligada para los adversarios-. El que más ha notado su ausencia, aparte del conjunto, es Guedes. Las contras con o sin esta dupla no son iguales.

 

Lobo

No estoy ni enfadado. Mira que lo intento y comprendo el enfado general, pero no. Y mucho menos humillado. Me da igual que el marcador final sea aparentemente duro, lo cierto es que por una vez no me impresiona. El VCF mereció caer por cuatro ni por uno siquiera. Vale, quizá tampoco ha optó realmente a la victoria, pero en todo caso el resultado no sólo es injusto, es muy engañoso. Pasó lo de siempre, lo esperado, lo previsible. Sorpresa ninguna.

Todo comenzó a gestarse en Las Palmas con las expulsiones y terminó de complicarse ante el Alavés en Copa con aquél partido tan intenso y larguísimo. Y el lastre que ya llevábamos se hizo muy pesado cuando Montoya, al poco de comenzar el partido, hizo un penalty muy impetuoso y demasiado a lo loco, quizá porque la defensa improvisada con Coquelin no estaba muy organizada. Y se hizo prácticamente definitivo cuando el trencilla de turno, no sé ni su nombre, pitó un segundo penalty de los que sólo conceden al Trampas. Bueno, puede que no sólo a ellos, pero al VCF jamás, como después se demostró. Con todo, lo peor no son esos penaltys que al VCF jamás le pitan a favor pero sí en contra, son las faltas y cortes de juego continuados y siempre gratis del rival, las gilicaídas pitadas en contra y el ‘sigan, sigan’ cuando deben caer de nuestro lado. Es esa forma de respetar y hasta bajar la vista ante los jugadores madridistas y la otra retadora y altiva con que se trata a los del VCF. Es la cara del árbitro mirando al tendido al salir al terreno de juego expresando algo así como ‘me suda el nardo lo que protestéis, aquí mandan mis cojones’, o como se diga. En definitiva, por si no fuera poco el financiero, el dopaje arbitral con que compite siempre el RM no tiene laboratorios al que mandar muestras ni comités que lo quieran cortar de una santísima vez, pero es un hecho. Así va esto.

Ya, sí, estoy siendo victimista, que dirá alguno. Pero me da igual, no pienso rajar del equipo, de mi no va a salir una crítica al juego colectivo del VCF haya sido mejor o peor, ni tampoco a Marcelino, ni siquiera a Parejo hoy, que se ha ganado mi benevolencia. No voy a criticar a nadie. Lo cierto es que hicieron todo para intentar remontar hasta que se quedaron sin pilas, y  el equipo se ha ganado de sobra el respeto de todos, al menos de los de casa ya que desde fuera no lo hará nadie. Y aunque las cosas se compliquen y hayamos perdido un partido con cuyos puntos yo en realidad apenas contaba, este grupo merece que el debate se centre en todo caso en el agravio comparativo habitual, y no en las dudas a nivel deportivo. Pero como ha dicho en twitter @VicenteManuelCM, lo mejor que podríamos hacer todos, incuidos jugadores y técnicos, es olvidarlo y hacer oídos sordos al ruido desde Madrid. Sigamos apoyando sin fisuras para evitar ser injustos aun sabiendo que estamos en un bache, porque de él sólo saldremos juntos. Y desde ya a por el FCB. Y luego a intentar ganar al ATM. Y luego… a seguir disfrutando.


 jamacuco

Que un Madrid ramplón te gane fácil no debería sorprendernos. Tienen grandes individualidades que te la pueden liar. Y atesoran un sempiterno amparo árbitral  y su «siempre justa» vara de medir. Si a eso le unimos la histórica persecución arbitral y federativa al VCF (solo lo pueden negar los ignorantes o los que están metidos en el ajo), el resultado de ayer no debería extrañarnos. Penalties que solo les pitan a ellos mientras que a ti te dicen «sigan, sigan…» Faltas que son amarillas para unos, y para otros se queda en toque de atención… Conversaciones (si no amenazas) con el árbitro que para ti se convierten en amonestación o expulsión. Lo de siempre… Por tanto…¿cuál es el debate entonces? Que el VCF también ha sabido históricamente superar estos hándicaps que el entorno nacionalmadridista esconde impunemente. Pero ayer los de Marcelino no lo hicieron.

Si nos anclamos en la excusa arbitral nos equivocaremos. A este VCF le falta mucho fútbol, fútbol del de verdad, del que te hace competir y ganar campeonatos. Es un equipo que durante ciertos minutos, puede jugar como los ángeles, con velocidad, con presión alta, con contundencia en las áreas, con alma…. Sin embargo llevamos un par de meses en que el equipo se diluye, se pierde y se pliega a las intenciones del contrario. Han dado un paso atrás, o dos, en cuanto a ambición y ganas. Al principio era algo sutil, contra rivales ásperos y campos de 2ª B. Pero ahora ya pasa en Mestalla y contra  cualquier rival. ¿Culpa de Marcelino o de los jugadores? Quien sabe; de todos un poco. Lo que da la impresión es que esta plantilla posiblemente haya llegado a su tope y ya no pueda sorprender a los rivales. Mal momento para mostrar flaquezas, justo en el cénit de la temporada, y donde en los próximos dos meses nos vamos a jugar Copa y presencia en Champions. Ayer un mal Madrid apenas sufrió y el VCF apenas puso en apuros a los merengues en 20 minutos de la 2ª parte. Ni la supuesta «masterclass» de Parejo, según algunos, nos salvó…. Quién sabe si por ahí vienen buena parte de nuestros problemas.

Desde mi punto de vista la única buena noticia ayer fue Soler, que en lo poco que jugó mostró de lo que es capaz. Y Mina, que sigue en un buen momento de juego y goleador. Kondogbia volvió a echarse a la espalda buena parte del juego en el centro (cuando no es su papel); Gayá y Rodrigo estuvieron activos pero poco productivos. Y Coquelin cumplió con el papelón asignado. Esperemos que pronto vuelva Murillo, un central sin florituras pero que se ha demostrado más eficiente que Garay y sobre todo el ayer ausente Paulista. Y …¿un nuevo lateral derecho? Así lo espero.


 

 

Ilustración del artículo vía valenciacf.com

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