Hoeman

  1. Espero mucho más de Prandelli. De momento, ha empeorado al equipo de Voro. La primera parte de hoy desastrosa: con un centro del campo romo y que ha tenido innumerables pérdidas de balón importantes, Montoya (sobre todo él), Mangala y Gayà haciendo aguas en defensa, sin capacidad asociativa, buscando únicamente la aproximación por banda, etc. Cuando llegó nos vendieron a Cesare como un entrenador que apostaba por los canteranos. Ahí están Lato, Soler, Villalba o Aridai sin minutos ni oportunidades.
    2. ¿Soy el único que piensa que Martín Montoya es un nefasto futbolista?
    3. En la segunda parte, con gol en contra y la necesidad de marcar; entra Munir por Montoya y cambio de dibujo de 4-3-3 a 4-2-3-1. 15 minutos gaseosa de Munir el vago(a su lado Jonas Gonçalves era un workaholic). Excelsos minutos de Nani (muy desacertado en la primera parte, pero no se esconde y siempre lo intenta), que estaba siendo el mejor… y Prandelli lo sustituye por Bakkali. Craso error por parte del técnico, hasta ese momento el volumen ofensivo había sido exclusivo del Valencia. A partir de entonces, más chances para el Granada. De todas formas un poco cara o cruz o correcalles.
    4. El mejor del partido volvió a ser Rodrigo, que sí, falla en el último golpeo o toma de decisión. (Lo mismo le ocurre a Cancelo). Y cuando consigue anotar, va y se lo anulan injustamente. Pero el hispano-brasileño dio una lección de aportación al juego colectivo con desmarques largos, dejadas, apoyos, prolongaciones, etc. Otra más.
    5. No pudimos ganar al colista en casa. Como dicen Lobo y jamacuco y tantos otros, este equipo juega al ritmo de Parejo, lo que se ha demostrado insuficiente. Ojalá sólo Parejo fuese el problema. (Cabe recordar que Gary Neville se lo cargó antes de morir; curiosamente cuando mejor jugó su Valencia). (Cabe recordar también que antes el madrileño se había borrado miserablemente).
    6. Offtopic: Resulta llamativo el ataque de dignidad que ha surgido en algunos periodistas que trabajan para emisoras o medios que en parte viven de difamar al Valencia.
    7. Offtopic(bis): También es llamativo que muchos periodistas descubran ahora que Suso García Pitarch es un caradura y un vividor, algunos de los cuales le pusieron una alfombra roja a su llegada. Precisamente el esquirol ya tiene un historial bien labrado como para sorprenderse. Hipócritas.


 

Drakul

Ni idea. No tengo ni idea de cómo analizar lo que le sucede al Valencia. Si creyese en el vudú buscaría en que lugar de las oficinas del club nos han colado al muerto. Porque esto no hay narices de entenderlo. Cancelo es un ejemplo ¿Cómo puede ser que un jugador de primera división, pretendido por todos los poderosos sea tan absolutamente incapaz de poner un centro bien en, no sé, quince intentos? ¿Cómo es posible que una defensa de cinco, puesta para defender por acumulación, sea capaz de dejarnos en fuera de juego una docena de veces? ¿Por qué cada decisión complicada de los árbitros cae en contra? ¿Por qué Rodrigo juega bien pero no marca y cuando lo hace se invalida? ¿Por qué sufre tanto una defensa con jugadores tan buenos como los que tenemos ahí? ¿Cómo narices explicamos que Parejo es el mejor del Valencia pero al tiempo tan perjudicial para el juego colectivo? ¿Por qué somos incapaces de generar peligro de córner con buenos rematadores?
La cuestión es tropezar. Se tropieza con el árbitro, o se tropieza con el portero (el memo Ochoa ha recordado a su mejor versión en el mundial), se tropieza con errores defensivos, con fallos de marca, con salidas de balón lentas, se tropieza al encontrar nunca el espacio, con fallos individuales espantosos cerca del área. Y tropezón tras tropezón, como recuerda @picsolabis en twitter, al Valencia se le está poniendo la cara del Atlético del descenso.


 

Jomi Lavarías

Cuesta mucho ponerse a escribir sobre el Valencia, CF. Pero mucho. Todas las semanas lo mismo, es como si hubiéramos entrado en un bucle enorme del que no podemos salir. Como puse en twitter, dan ganas de hacer copy – paste de cualquiera de las crónicas que he escrito en anteriores jornadas, le cambio el nombre el nombre del rival y probablemente nadie se daría cuenta.

Del intolerable, y grosero, Valencia de la primera mitad al inoperante e impotente de la segunda mitad. Entre medio imagino que habrá habido una prandellina en el descanso pues el cambio de actitud se ha notado aunque no ha bastado para ganar al ¡último! clasificado de la liga. Puesto éste en el que nuestro Valencia a la deriva y sin rumbo empieza a opositar firmemente. Y escúchenme, lo está haciendo de maravilla. Que no estemos en dos o tres jornadas ya intentando acceder a él, ¿eh?

Soluciones… se decía que era cosa de entrenador. Cuando tengamos un entrenador como Dios manda esto cambiará, que el chino se deje de experimentos, decían… Mec. Cinco partidos y salvo algún destello aislado la cosa sigue igual si no peor.

Cuando fichemos defensas la sangría de goles encajados cesará y por fín mantendremos la puerta a cero, decíamos otros… Mec. Se ficha a dos centrales alabados por todo el mundo y por los aque cualquier equipo suspiraría y lo de mantener la puerta a cero parece algo paranormal. Íker, Jiménez, no el otro, tú en Valencia te forrarías.

¡ Ahora nos hace falta un 9 ! Ya estoy temblando. Cuando Suso (¿Suso dimisión? ¿pero no ficha Mendes? qué lío, joder) nos traiga un delantero goleador, armáos de paciencia, porque seguramente empezará una sequía goleadora que ni los más añejos del lugar recordarán.

En fin, nos ha mirado un tuerto. O una colla de tuertos, porque esto no puede ser cosa de uno solo, no no no.

Y mientras tanto, el amo ni se entera. O no se quiere enterar, que es peor. Sí, la esperpéntica jugada de la primera mitad entre Mangala y Parejo (¡cómo y cuánto corre este chico!) resume bien a las claras la situación actual del Valencia. Caos.


 

Lobo

Indignante partido del VCF en Mestalla. Otro de una larga serie de la que todos hemos perdido la cuenta. 1ª parte de verbena dejándose casi avasallar por un Granada colista que no ha marcado más goles porque es… el colista, que si es un equipo de la parte alta nos encala. Y una 2ª en con algo de empuje local, por pura vergüenza, unido a la desorganización del rival precisamente cuando ha querido echarse atrás para amarrar, que ha servido para empatar… y poco más.

Pero paso de hacer crónica al uso o hablar de lo malo que este o los fallos del otro, no me apetece. Es duro ser en estos momentos del VCF. La absoluta decepción con el proyecto Lim es ya inequívoca. Esto no era lo que esperábamos, es incluso peor de lo que los más agoreros pudieron vaticinar. La dinámica es tan horrenda que el miedo es palpable en cualquier aficionado con dos dedos de frente. Ir a Mestalla queriendo ilusionarse pero sabiendo que lo más probable es que salgamos de nuevo cariacontecidos, es ya la norma. Y es muy duro. Lim aparenta haber decidido dinamitar desde dentro al VCF, algo del todo imposible, pero el abismo se puede adivinar de seguir esto así. Y lo único que cabe es que esto NO SIGA ASÍ.

Ahora parece que se ha abierto la veda definitivamente contra Suso Gª Pitarch. Y es normal, aunque en muchísimos casos bastante ilegítimo. No me sorprenden las bien ganadas críticas, pero sí que tantos parezcan descubrir ahora el fuego. Yo, y hablo de mi porque es lo único que puedo hacer con total propiedad, critiqué duramente la llegada de Suso, luego quise apoyar porque no quedaba otra, volví a ser muy crítico cuando avaló la llegada de Gary Neville y luego Ayestarán en vez de la de un entrenador con los huevos pelaos de entrenar equipos de élite. Y definitivamente entré a matar cuando se renovó a Ayestarán en contra de toda lógica posible. De ahí vienen estos lodos, y así se avisó. Por tanto yo sí me siento perfectamente legitimado para pedir la destitución fulminante de Suso como cabeza visible de la parcela deportiva del club. Pero ya, hoy mejor que mañana. Ese hombre NO PUEDE seguir decidiendo los destinos deportivos del VCF.

Y no es buscar culpables, es exigir soluciones. Cuando el equipo funciona tan horrorosamente mal en lo deportivo, lo justo es cargarse sin contemplaciones al entrenador, pero si el siguiente, un tipo contrastadísimo y capacitado, tampoco es capaz de sacar provecho, también debe salir el que diseñó como Director Deportivo esta plantilla descompensada, falta de calidad, inteligencia y garra con la que se ha encontrado Prandelli. Me tiemblan las piernas al pensar que Suso pueda hacer los fichajes de invierno, y pido a todo lo sagrado que no sea así, porque creo que el equipo no mejoraría. A los hechos me remito. Y sin mejoras nos vamos al hoyo. La planificación de invierno y a largo plazo la tiene que hacer otra persona, alguien capacitado, orgulloso y que quiera lo mejor para el club, no para su persona. Suso ha demostrado de sobra su incapacidad por acción u omisión, y no cabe más que cambiar. Ni continuidad de proyecto ni hostias, esto es un drama que aun puede empeorar mucho. Y sí, Peter Lim es culpable subsidiario de este desastre absoluto, pero creo que ese hombre, que sabrá mucho de altas finanzas pero no tiene ni puta idea de fútbol, se aconseja muy mal tanto por su amigo y socio Mendes como por la gente de la que se ha rodeado. Así que es tiempo de dar un volantazo, Lim debe darse cuenta, que alguien a quien de verdad importe el VCF se lo diga, y hacerlo ya, sin la pereza de movimientos habitual en él, porque esto no lo aguantamos más.


 

jamacuco

Ver un partido del VCF es entrar a comprobar empíricamente la teoría del eterno retorno de Nietzsche. Y no salimos de esa espiral. O bien ocurre algo pronto, se pone cordura en el club y entorno, o el final antes o después ya sabemos cuál va a ser. El culpable de esta situación, como vengo señalando desde hace meses, es el Sr. Peter Lim. Él dinamitó el club y ha actuado con infinita soberbia, desdeñando situaciones que le habrían hecho triunfar con poco que hubiera hecho, y empecinándose en una gestión alejada de los intereses del valencianismo que está demostrando día tras día, mes tras mes, que es errada y errática. La relación Lim-valencianismo parece estar llegando a un punto de no retorno.

Ver un partido del VCF y tratar de ofrecer una crónica original es algo prácticamente imposible. El VCF está jugando un partido eterno los últimos 15 meses. Un partido infinito en que saltan las costuras de una plantilla maltrecha y mal confeccionada, después de tres periodos de fichajes (verano 15-invierno15/16 – verano 16); un partido sin fin en el que cada vez son más injustificables las decisiones deportivas adoptadas; un partido que no acaba nunca que deja al descubierto la falta de calidad, carisma y competitividad de unos jugadores ramplones y sin otra motivación que salir cuanto antes del club. Ese es el legado que nos está dejado Lim y su “no-estructura organizativa”: Todos estamos de paso, lo importante es tener paciencia, no alzar mucho la voz y aceptar la sumisión al jefe supremo.

Ver un partido del VCF es ver a un equipo perdido, sin timón. Es difícil señalar dónde está el problema. Cierto que la delantera (Rodrigo sobre todo) falla como una escopeta de feria; cierto que la defensa no cierra ningún partido con portería a 0. Sin embargo el timón de este barco a la deriva es el centro del campo, y realmente puede ser la clave de los resultados. Parejo ya sabemos lo que da, lo que no da y lo que quita al equipo. Alguien debería de plantearse que quizás su estancia en este club está siendo demasiado larga. Enzo pone mucha brega, pero no es capaz de mantenerla durante 90 minutos. Tampoco parece ser el motor emocional para los compañeros. Y Suárez, sin cometer grandes errores, no está aportando la solidez necesaria en el campo. Las bandas, hoy Nani y Cancelo, no apoyan lo suficiente en defensa y tampoco están siendo decisivos en ataque. En definitiva, no parece la plantilla más adecuada para lo que se le pide a este equipo y eso tiene responsables claros: en primer término Suso, pero sobre todo, las nefastas directrices del Sr. Lim. Prandelli va a tener que trabajar de valiente para sacar algo de estos jugadores y ser contestatario ante el singapurés para pedirle jugadores de verdad, no promesas vendibles.

Ver un partido del VCF, para acabar, es una invitación a la reflexión de todo lo que ha pasado en este club la última década. Muchos culpables y pocos dando la cara y asumiendo responsabilidades. La cultura del avestruz que ha instaurado Meriton, alguno ya la venía practicando por lo bajini a pesar del (es)túpido velo que cierta parte del entorno (prensa sobre todo) logró extender. Humildad y profesionalidad son necesarias en el club, pero también fuera, en el “entorno”. Así nos luce el pelo.


 

Mario Selma

Venía la previa caliente, salpicada de polémicas extradeportivas de diversa índole. Un club de atracciones, donde la rutina y el aburrimiento no tienen cabida. Abróchense los cinturones y tensen el pescuezo que se avecinan turbulencias con la situación del equipo, el silencio ensordecedor de la directiva, la prensa de uñas y la hinchada en cólera. Lo que viene siendo una tormenta perfecta para ahondar en la depresión global en la que está inmersa la entidad y que le está viniendo grande a los pensadores asiáticos y funcionarios autóctonos. Superados. Este desborde no se solventa con ingredientes como barreras arquitectónicas y hacer la cobra -eh Suso, más dura que el donut procrastinado-. Una receta que no liga con los requerimientos del entorno y que tiene visos de conducir a una implosión más próxima que un hat-trick de Rodrigo.

En el verde, 3 notas principales: el mediocampo, para mí la línea más frágil del equipo, es una sombra en el juego del equipo. Está porque tiene que estar, pero no es protagonista -apesta ya este término- en ninguna de las facetas que le corresponden: contener, robar, fluidificar. Como resultado tenemos a tres centrocampistas, desubicados todos y cada uno de ellos, que no hacen uno bueno en plenitud. Una amalgama de despropósitos. Segundo, me sigo preguntando a qué se debe esa manía obcecada de percutir por banda si tenemos un 9 que no va al primer palo a lo Alcácer, no descuella como rematador de cabeza ni es un cazagoles nato. Apuesta por insistencia, que no por conveniencia. Otro método sin ton ni son. No hacen faltan más probaturas para saber que Rodrigo es segundo punta y que como delantero-boya cumple a la perfección descargando el juego y yendo al espacio, pero ahí muere su aporte ofensivo. No escaso, pero insuficiente para darle sentido al plan y materializar esa cascada de llegadas inocuas por inermes. Y por último, el arreón, la intentona, la ráfaga, nadar para morir en la orilla, como elemento predominante en este Valencia con la consistencia de una casa de paja. No hay idea interiorizada en la plantilla, no trasciende de la capa superficial cognoscitiva. Por eso a la más grácil contrariedad se difuminan esos trazos semipotables, abortando la continuidad requerida, desmoronándose todo por la falta de amor propio de un grupo que se despojó el traje de la competitividad bajo el paraguas del insultante trasiego en la banqueta, no sé si arrastrados por la indeterminación que transmite la dirigencia, haciendo un #MannequinChallenge de manual en todos sus estratos, o simplemente por ser una condición inherente a este vestuario. Lo cual sería un problema más grave de lo imaginable. Y cuyo responsable inmediato será, ya que se encuentra calentito en el nido meritoniano y no se intuye un arranque de dignidad, el mismo encargado de reconducir su propia obra. Su propio fiasco. Su propia vergüenza, a la que los opinantes de a pie estamos desautorizados a reprobar. Casta y censores. Lo tienen todo.

Prandelli también tiene su quesito subsidiario. Por estrategia ausente, por falta de pizarra ganadora y por inacción en momentos clave. No obstante, la situación deportiva, que podemos etiquetar de crisis sin miedo a equivocarnos, no le es achacable al italiano. Le es a quienes manejan el cotarro, a quienes toman decisiones, a quienes ocupan sillones principales. Porque al del trono de hierro, al que ahora se le invita a irse a casa -cuando precisamente es donde está, sobreprotegido de picos de tensión embarazosos que no son de su apetencia-, es intocable, inaccesible y cabe la posibilidad que impertérrito. Un último inciso; ¿qué es una grada de animación que no anima cuando la remontada del equipo es posible? Conste que poniéndome en su lugar puedo llegar a entender su guerra particular contra las medidas de quienes no los quieren. Pero del 1 al 90 no deberían contravenir alguno de sus sacros preceptos fundacionales y perder la razón en el abismo de las formas. Esa constructiva tregua verbal mientras las habichuelas estén en juego reforzaría su proceder. Antes y después a discreción. Jorge, ni contra el peor farolillo rojo te pudieron brindar la victoria. Requiescat in pace.


 

Toni Calatrava

Tras haber leído las excelentes crónicas de mis compañeros, poco me queda de añadir respecto a la debacle ante el Granada: fue un partido donde todos los fantasmas de la temporada pasada volvieron a aparecer. De todo lo que escucho y leo, me preocupa especialmente el temor que se ha incrustado en la mentalidad del valencianismo, respecto a un hipotético descenso.

Aunque es cierto que el equipo está mal, y chapotea alegremente junto a un nutrido de aspirantes a la mediocridad; creo que el hablar constantemente de los puestos de descenso, al igual que elucubrar con una remontada hacia zonas europeas, no es conveniente en estos momentos. La situación actual pide, más que nunca, aplicar la filosofía del “Partido a Partido” para evitar que los jugadores salten al césped angustiados, antes incluso de que ruede la pelota.

Con todas las carencias que tiene esta plantilla, con una columna vertebral con Alves, Garay, Mangala, Enzo, Suarez y Nani, hay suficiente potencial para salir adelante y navegar en aguas menos procelosas. Especialmente con un técnico cualificado al frente de la misma. Solamente un par de refuerzos de cierto nivel ya elevarían el potencial del equipo en los puestos donde no está funcionando (creación de juego, ataque); no hace falta cambiar hasta las perchas: es un tema de entrenador, por un lado para rescatar la parte anímica; y por otro, ajustar un once que realmente sea competitivo.

Veremos en este punto, cual es la implicación de Peter Lim para incrementar el potencial del equipo, con todas las dudas que está generando su aparente inacción. Posiblemente debería mostrar algún síntoma de reacción ante la abierta desafección que está sufriendo ante su afición, perfectamente alentada por un coro mediático perfectamente afinado.

Me preocupa que algunos de tanto empujar para que caiga Meriton, acaban por arrastrar al acantilado también al equipo. Entendería la existencia de una oposición con un proyecto solvente y viable en lo económico, con capacidad de negociar con Bankia unas condiciones de compra y subrogación de la deuda. Lo que no entiendo es que se pretenda la salida del accionista mayoritario actual sin tener como sustituto otro, como mínimo, de igual solvencia económica.

Críticas todas: a mí no me gusta nada la gestión de Meriton y sus empleados; pero para sustituir a Lim hay que tener un proyecto accionarial que mejore el actual.


 

Ilustración del artículo vía www.valenciacf.com

4 comentarios en “VCF 1 – GRA 1 | Desastre absoluto VCF 1 – GRA 1 | Otro tropiezo indefendible, esta vez ante todo un colista. Y en Mestalla, que duele más. El VCF no levanta cabeza, y los aficionados menos.

  1. Qué infinitamente de acuerdo. Es el mismo partido que no acaba, no acaba nunca. No obstante, el Valencia, tras la salida y entrada de unos cuantos entrenadores, no cambia nada. Es el mismo sistema y los mismos jugadores. El argumento no puede ser que son los mejores que hay, porque el equipo pierde. Perdemos todos los partidos, pero existe un temor a tocar el 4-3-3 maldito, o quitar a Parejo o yo qué sé ya… La solución pasa por bajar a segunda, hecho que aseguraría una limpieza completa.
    PD: Montoya es muy malo, pero malo de verdad.
    Munir tiene algún destello pero es un jugador horrible. No se ofrece ni presiona. Parece haber heredado los pocos defectos de Messi, ninguna de sus virtudes.
    Bakkali está sobrevaloradísimo a niveles que se me escapan. Su bagaje es un buen gol contra el Levante. El chico encara pero rara vez se sale con la suya. Se ofrece poco y sólo para hacer una jugada que consiste en abrirse disparo en diagonal.
    Deberíamos recuperar a Santi Mina para la causa. El chaval hace tiempo que lo poco que juega lo hace mal, pero por esa misma regla de tres hay jugadores que no deberían jugar nunca más.

  2. Buenas y realistas, aunque tristes crónicas. Espero que se equivoquen en sus pesimistas vaticinios (aunque no se como). A ver si reina la cordura y juegan respecto a lo que cobran y donde juegan…..

  3. In defence of Cancelo. He did 2 or 3 great crosses, but it is difficult to cross to a team mate when there aren’t any of them in the penalty area, when the number 10 is on te half way line putting an opponent clean through on goal. His crosses to Nani and Rodrigo in the first half deserved goals, his pass to Parejo in the 2nd led to a goal.

    Funny to read Jonas’ name. I have been thinking of him whilst watching Dani as the 10, Dani is Jonas but without the goals or ability to head the ball.

    The team needs to attack and lose its fear. If the players don’t trust each other they should be dropped and replaced with the ones who will play without fear and will do the job they are in the team to do – Gaya will defend and cross accurately or out, Dani will play through balls and support the striker or out, Suarez will help the defenders so that Enzo doesn’t have to, Mangala will stay in position because others will be fighting for the ball, Alves will come off his line and help his defenders rather than playing safe and dropping them in it. And they will get some bodies in the opposition area because that way we may get a few goals.

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