Peris

Venían los Reyes, -bueno, más bien el Grinch Tebas- con el regalillo envenenado del fútbol en horario de sobremesa. Y había que elegir entre jugar en casa o ver el partido. Y casi la mejor opción fue la primera. Porque el Girona, con la garra inicial y un planteamiento que se le atragantó a los de Marcelino, provocó el murmuro tras el buen centro de Mojica y el no peor remate de Portu, producto de la cantera que buscó su espacio en el fútbol de élite fuera de Valenciastán y ese perdón, bastante artificial en la mayoría de los casos pero que parece sincero en el caso del bueno de Cristian. Después de esto, Guedes. Un jugador que con solo su presencia aporta una sensación de peligro inminente y provoca errores en el rival con su electricidad de regate y velocidad directa. Tuvo el Valencia suerte, sí. Pero que el rival parta con una inicial defensa de cinco, por cuestión numérica, te facilita ciertos espacios en el centro del campo. Y en esto, con el buen trabajo de Parejo y Kondogbia se comenzó a decantar la balanza y, desde fuera, se gestó la remontada, con el penalti a Gayá, uno de esos que a veces se pitan y, a veces, no. Este va a ser el devenir del Valencia en todo lo que queda de temporada. El factor sorpresa ya ha desaparecido. Todos, absolutamente todos los equipos que se enfrenten a los de Marcelino y Uría van a ir con el cuchillo entre los dientes. No habrá más condescendencia y querrán su cuota de portadas. Apasionante trabajo para el cuerpo técnico: buscar soluciones a los tapones creativos. Y nosotros, a disfrutarlo como podamos. Sufriendo, claro. Fútbol. Que invento más maravilloso. Y Tebas, cargándoselo a martillazos.


Jomi Lavarías

Buen partido el disputado hoy en Mestalla por dos equipos que han sabido tratar muy bien el balón. Ganó el Valencia, merecidamente creo, pues en el cómputo global del encuentro fue ligeramente superior, pero los gerundenses, en su primera visita liguera al coliseo valencianí, no le perdieron la cara al partido en ningún momento y se mostró como un equipo trabajado y que de seguir así no tendrán problemas en permanecer un año más en la mejor liga del mundo. Esa liga que pone unos horarios que deja descontentos a todo el mundo. Menos a los chinos, claro, que habrán seguido el encuentro con una expectación inusitada pues ellos de reyes no saben. Igual expectación que en Bruselas, donde Puigdemont habrá dado un buen respingo con el gol de Portu. Junto al Leganés, los dos mejores equipos que han pasado por Mestalla.

Pero KRLS no contaba con la estelar aparición de otro portugués, el nuestro. O casi nuestro. Sólo unos «pocos» millones separan el estado contractual de Guedes con el Valencia de ser cedido a traspasado. Depende de la generosidad del magnate «singapuresí» que controla los hilos valencianís. Guedes levanta pasiones y desde los tiempos de Villa/Silva no ha habido mejor futbolista defendiendo la blanquinegra. Lim, si se pone a tiro, dispare.

Y es que la cosa se puso muy gris, como el cielo. Pero a base de fútbol y tranquilidad, el Valencia le dio la vuelta al marcador y gracias al buen hacer de casi todos los futbolistas (de nuevo nada que reprochar) hemos logrados tres puntos fundamentales tras los dos tropiezos consecutivos que a punto hicieron disparar todas las alarmas. Pero no. Cuando todo parece torcerse regresa la solvencia. Seguimos fallones arriba, falta ajustar la puntería que ya tuvimos. Y atrás por arriba hoy nos comieron todas las tostadas, pero está Neto, que paró todo lo que había parar. En definitiva, buen estreno liguero de 2018.

Amunt!!


Lobo

Ganar, ganar y ganar. Ganar como sea. Y se ha ganado. Pues perfecto, todos contentos y a por el próximo partido.

Esa podría ser mi crónica, así de concisa. Pero para justificar el sueldazo que me paga @cafemestalla tengo que escribir algo más, claro. Así que, al lío.

No tengo claro qué he visto esta tarde. No sé si el VCF ha hecho un buen partido y merecido ganar holgadamente o es el Girona el que ha hecho un buen partido y merecido algo más que salir sin puntos. Lo cierto es que durante la primera parte he visto al equipo visitante haciendo lo que querían en todo momento. Han salido a morder desde el princpio, sorprendentemente guiados por dos laterales magníficos, al menos hoy. Y una vez conseguido el gol entrando como han querido por la banda de Vidal y Pereira, se han echado atrás buscando que fuera definitivo. Desde entonces ha parecido dominar el VCF, arrinconando la meta rival hasta que en una de las excelentes galopadas de Guedes y con algo de suerte, ha llegado el empate. Pero tras esto el Girona ha vuelto a empujar, demostrando que sólo se dejaban dominar, y los locales han tenido que recular de nuevo. Para nuestra suerte ha llegado el descanso.

Y como es habitual la charla del vestuario ha cambiado el partido. En la reanudación, aun sin hacer un gran partido, el VCF ha empujado mucho y gozado de ocasiones que, porca miseria, nuestros esforzados, muy honestos pero limitadísimos delanteros han desperdiciado sin remedio. Incluso Vietto ha malbaratado la ocasión de estrenarse en su estreno como valencianista, valga la renfunfancia.

Pero, ah, gracias a que el árbitro se ha acojonado tras las duras palabras de Parejo en el túnel de vestuarios, llenas de fuerza y carácter, que le han presionado para pitar el penalty que no era por el que dejó sin señalar que sí lo era (icon_guiño icon_guiño).

En fin, que hay que ganar como sea, y yo estoy feliz. Ojalá sea la tónica de todo este 2018 y estaré, igual que todos, exultante. Amunt!


jamacuco

Victoria con más sombras que luces. Y me preocupa por lo que viene. Eso sí, victoria al fin y al cabo que es lo que realmente importa.

El VCF salió mal al encuentro, con un Girona dominador del juego y ocasiones y Neto como protagonista que evitó que los catalanes se adelantaran ya en el minuto 4. Poco después, en una muy mal defendida jugada por parte de todos (lateral  e interior derecho, centrales y mediocentros)  el exvalencianista Portu consiguió cabecear a red un centro del buen lateral izquierdo Mojica.

A partir de ahí el partido cambió de color y el VCF reaccionó con casta más que con juego. Un Guedes hiperactivo, un Gayà envalentonado y un Rodrigo con galones  revolucionaron el partido, creando ocasiones y arrinconando al Girona en su área. Parejo, Kondogbia o Garay también ofrecieron buenas sensaciones. Todo esto se tradujo en el empate ( en propia puerta con centro de Guedes), que pudo acrecentarse con un penalty escamoteado por el trencilla Borbalán a Rodrigo en el final del primer tiempo. No ocurrió lo mismo en los albores del segundo, donde sí que se atrevió el colegiado a pitar penalty que ejecutó Parejo.

En el último tercio del partido el VCF bajo revoluciones y se quedó a verlas venir, jugando como más cómodo se siente, al contragolpe, y teniendo la sentencia del partido en más de una ocasión. Mina, Rodrigo (y el rebote de Maksimovic) y el debutante Vietto tuvieron esa oportunidad que desgraciadamente marraron. El Girona dispuso de alguna ocasión para empatar pero Neto estuvo hiperseguro y se pudo cerrar la victoria no sin cierta tensión en el estómago.

Si bien la victoria es fundamental para empezar alegres el año después de dos derrotas consecutivas, Marcelino ha de afinar la maquinaria. El VCF ha perdido el «punch» que tenía a principio de Liga, donde ofrecía mucha más efectividad, garra e incluso calidad de juego. Además parecemos mucho más vulnerables en defensa y nos cuesta mantener la portería a cero (Paulista pide banquillo y el lateral derecho pide nuevos inquillinos). Las ausencias de Murillo y Soler se antojan básicas para explicar este cambio, que junto a Guedes (afortunadamente reaparecido) han sido las bajas estos últimos partidos. Desde mi punto de vista sigo viendo vulnerable al VCF en el centro del campo donde parece que no acaba de controlar los partidos, y cuando las bandas y delanteros no están inspirados (como en este partido Pereira, Vidal o Mina) el equipo sufre y nos hace sufrir en demasía. ¿Vendrán soluciones las próximas semanas?


 

 

 

Ilustración del artículo vía www.valenciacf.es

Un comentario en “VCF 2 – GIR 1 | Dulce roscón de Guedes Primera victoria del año en Mestalla, sufrida, trabajada, pero merecida, aunque las dudas siguen. Así lo hemos visto.

  1. My concern is that the team currently has a single tactic – give the ball to Guedes and hopefully something will happen, otherwise rely on individual moments of brilliance or a set piece.

    There were also a few times yesterday when players seemed switched off – not offering themselves to receive the ball when team mates were under pressure, not doing their defensive work or not tracking runners into the penalty area.

    There are a few positions where players know that if fit they will play, some of these are totally deserved due to match winning or saving performances, others are just safe due to their replacements not being valued or them being adored and whilst at times performing well they could be doing better. A little less pointing and complaining and a little more making good things happen is required.

    Vidal was a little unfortunate to be subbed – defensively the right side is always a weakness because the right sided midfielder doesn’t get the help that Kondogbia offers the left hand side when opponents have the ball, also he often has to move centrally to help protect the central defenders from midfielders making runs into our area, which again Kondogbia offers more when it comes from nearer to our left side (yes he also covers the right side a lot but he shouldn’t have to do both). Vezo has been unfortunate to be dropped. There are a few that must begin to suspect that no matter how they perform they won’t stay in the team and others who know they will.

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