Jomi Lavarías
Pasan los partidos y siguen las derrotas, una detrás de otra, los irrisorios empates en casa ante rivales que aún están milagrosamente por detrás de tí en la clasificación y de vez en cuando, muy de vez en cuando, llega alguna victoria. Y nadie, absolutamente nadie hace nada. Los que mandan ni traen refuerzos a una muy limitada plantilla (por su culpa) ni son capaces de pegar un volantazo para tratar de cambiar la dinámica. Gracia I, el mártir, desde el pasado 5 de octubre debía estar fuera del club. Casi cuatro meses después sigue siendo incapaz de sacar rendimiento a una plantilla que ni mucho menos es para estar ahí abajo con 20 míseros puntos en 20 jornadas. Un tercio de los puntos jugados. Cuatro meses que son una pérdida de tiempo. ¿A qué espera Meriton para cepillarse a éste hombre? Un entrenador que está al nivel, o peor, que los Neville, Ayestarán o Antonio López de turno.
Hagan algo, tomen decisiones, reviertan la situación deportiva del equipo y después vendan sus acciones a quién cojones quieran y lárguense de aquí.
Peris
Una primera part amb un equip pràcticament desconegut i una segona sense cap explicació a l’eixida. Valentia al primer acte, defenent molt amunt i fent somiar a la parròquia. La segona part va ser com el despertador d’un dia de faena després del cap de setmana, una tornada a la realitat en la que no queda altra cosa que fer que seguir treballant. Ja ho sabem tots però dos jugadors que serien titulars per construcció de plantilla com Torreira i Kondogbia són jugadors residuals en un equip que porta camí de ser un candidat a guanyar la lliga amb un entrenador que, molts anys després, té moltes opcions de ser campió de lliga com va ser en aquell temps Rafa Benítez. La Copa i lliga al l’horitzó esperen. I no arriba cap jugador més, sembla.
Inexplicable.
Es Inexplicable.
Una primera parte de altísimo nivel, jugándole de tú a tú a un Atleti que aspira a todo y es el equipo de moda el fútbol español. Con inteligencia, con buen posicionamiento, con ilusión y con peligro. Golazo de Racic, permisividad arbitral hacia los de siempre y gol en contra de los que se anulan sin ni tan siquiera VAR al Valencia.
En el descanso los grupos internos y públicos elogian la excelente primera parte, y un sentimiento común, con este equipo, sí que se puede tener paciencia y confianza.
¿Qué ha sucedido en el vestuario en el descanso?
Recuerden: responder NADA es UNA RESPUESTA.
Es lo que yo apuesto, que el entrenador no ha hecho absolutamente NADA.
Hace unas semanas hablaba con un importante exjugador de los nuestros y me decía, más o menos textualmente que ese entrenador del que hablábamos era un cabrón y que tenía al vestuario, valga la redundancia encabronado, pero… que tenía libro, que les hacía ganar. Y por ello todos le respetaban.
Pues… aplíquese el cuento.
¿Cuál es el libro?
¿Cuál es el plan?
¿Es así como se ganan los partidos?
Porque la segunda parte es inexplicable. Tiramos líneas atrás, cerramos los ojos y a esperar los golpes de un Atleti que nos ha noqueado con facilidad… “pues… gracias” habrá murmurado el Cholo.
Poca crónica más que contar.
Esto va de que no nos hagan mucho daño, que el río nos lleve y que sea rápido, que sea muy rápido y lo más indoloro posible. Creo, sinceramente que los jugadores quieren luchar, quieren rebelarse ante su destino pero necesitan respuestas.
Recuerden: Responder NADA NO es una respuesta… ¿o era que sí?
Hoeman
No por esperado, la desilusión se apodera menos del aficionado. Porque el Valencia empezó planteando bien el partido: sin dejarse intimidar por el Atlético, bien posicionado en el campo, llegando al área. Y se adelantó vía golazo por disparo lejano de Racic -pese al gol, pocos disparos más vimos desde fuera del área-. Aunque poco duró la alegría y a balón parado el Atlético empató. No obstante, creo que la primera parte che fue buena, con especial actuación de Diakhaby. Empieza la segunda parte y el francés se lesiona. El Valencia está más metido atrás y da la sensación que se conforma con el resultado, aunque sigue atacando sin claridad, y merced a una contra llega el segundo de Luis Suárez. Ahí todos temimos que se acabó el partido, como así fue. Se echaron de menos cambios antes de que llegara el tercer y definitivo gol de Correa (que siempre nos marca). Podemos hablar de Jaume, de Correia, de Yunus, etc.; pero a quienes creo que hay que exigir más es a Paulista -muy mal en el gol de Luis Suárez-, Gayà -muy mal en el gol de Correa-, Soler o Maxi; porque son los que deben tirar del carro. Hoy, durante la mayor parte del partido, han estado discretos. Debemos ser conscientes que los partidos que hay que ganar son los otros, pero no por ello una derrota como la actual duele menos.
jamacuco
Partido que muestra todas nuestras carencias como otras veces ya he comentado: falta de contundencia, falta de calidad dentro y fuera del campo, falta continuidad en la concentración y esfuerzo. Si además es contra un rival que juega con violencia y protección arbitral, sabes que has de hace más de lo normal para ganar. Por tanto era casi una misión imposible.
De todas maneras el VCF empezó bien. Combinando, dominando en bastantes minutos y con un golazo de Racic. Poco nos duró la alegría, pero el VCF no se deshizo y acabó la primera parte dominando sobre el césped. Racic, la movilidad de Vallejo, las aportaciones por banda de Cheryshev o Yunus junto a los laterales, el trabajo de Soler…
Sin embargo ya sabemos cómo es el Atlético del sucio y chulesco Simeone que algún día la vida se la devolverá con creces aún siendo un buen entrenador. Los madrileños salieron en la segunda parte a morder y en poco tiempo dieron la vuelta al marcador y prácticamente sentenciado el partido. El cambio de cara del VCF fue brutal,pareciendo un equipo muy débil, sin saber qué hacer para ganar, sin sorpresas tácticas para sobreponerse al rival… No se entienden cambios tan drásticos de una parte a otra, y no es la primera vez que ocurre. Incluso los últimos minutos denotaron cierta pasividad, pasotismo, incluso desde el banquillo con los cambios de jugadores y los no cambios tácticos.
En cuanto a los refuerzos… no esperemos nada. La burla del ínclito Sr. Lim está siendo para marcar claramente sus intenciones.
Amunt!!