MGA 1 – VCF 2 | Milagro en tierra santa Victoria casi inesperada del VCF en La Rosaleda cuando todo parecía encaminado a otra dolorosa derrota ante un colista. Estas son nuestras impresiones.

Peris

Está claro que los partidos duran noventa y tantos minutos. Pero este párrafo que van a leer ustedes habla de los ochenta primeros. En los que la brillantez y el supuesto talento del tercero de La Liga fueron neutralizados por un equipo hundido, colista y que sabía que la única manera de poder sacar algo positivo era correr más que el rival. Y a poco consiguen que los aficionados malaguistas manden mensajes a sus parientas con la consabida estrofa argentina «¡Que no me esperen en la casa!». Durante esta temporada se han perdido partidos y no se ha soltado la voz de alarma con esa excusa de firmarlo todo por la trayectoria del año pasado. Eso ya no vale. Es, hubiera sido, inadmisible perder en Málaga. Como lo fue perder en Las Palmas. Sobre todo después de la primera vuelta que ha hecho este mismo equipo. Con estos mismos recursos. Con esta misma manera de jugar.

Pero, por fortuna para el valencianismo y los bares de la ciudad, en diez minutos se resolvió el entuerto. Milagro en tierra santa, como licencia periodística. Una aparición aérea de Coquelin, que va demostrando que es algo más que un especialista en tackles, y un chispazo de Guedes en la única opción que tuvo el Valencia de jugar con espacios, mantuvo la distancia con los de atrás, ya que el Sevilla sí supo ganar en Las Palmas, gracias a su resurrección italiana y, porqué no decirlo, una desacertada decisión arbitral al final.

Si se ha de ganar partidos, puestos a elegir, si ha de ser con sufrimiento, que sea con dominio. Por comenzar a ganar ese respeto que se ha perdido. Esperemos que esta semana sea la primera buena de las de competir solo cada siete días.

Por cierto, si quieren flagelarse con el gol anulado al Málaga y hablar de injusticia, que no me esperen.

Hoeman

Dulce victoria del Valencia, a pesar de la imagen ofrecida a lo largo de muchos minutos de la segunda parte, con el marcador en contra. Pero desde el principio: el Valencia hizo una primera mitad como mínimo aceptable, mas la intensidad adrenalítica del Málaga y la permisividad arbitral hicieron que los che no pudieran crear peligro -cada balón a los delanteros y/o extremos cercano al área era robado a través de falta, la mayoría no señaladas-; los malaguistas atacaron con acierto y en abundancia a través de las bandas, abusando de los centros laterales sabedores que Neto no iba a salir del área pequeña. Nuevamente a partir de un córner, en un balón que pasó a través de una maraña de jugadores de ambos equipos, se adelantó el malaguista Ideye. No se debería culpar a Vezo del gol -que hizo un mediocre partido en el lateral- porque: a) es el delantero el que va cara a la portería (si la toca Vezo es gol en propia puerta muy probablemente), b) Vezo intenta anticiparse al defendido, c) entre la maraña de jugadores no ve el balón llegar. La única forma de evitar ese gol hubiera sido cometiendo penalty. O quizá Neto podría salir alguna vez de debajo del larguero. El Valencia intentó el empate a través de combinaciones pero la intimidación -no señalada por el árbitro- se impuso. Preocupante fue la segunda mitad, con el Málaga imponiéndose en juego y ocasiones durante los minutos iniciales, y el equipo incapaz de enlazar jugadas peligrosas. El centro del campo muy romo, ni Parejo ni Coquelin -buen partido, con gol, pero creo que Kondogbia es mejor- creaban ventajas. Tanto es así que me hubiera gustado la entrada de Maksimovic al césped. De hecho, marcó el Málaga un segundo gol que fue anulado por el árbitro. Entraron Zaza y Rodrigo para decidir, pero con un centro del campo incapaz, costó entrar en el partido. Y pese al pobre partido de Parejo, terminó con gol y asistencia. Si hay algo que no se puede discutir es que es decisivo a balón parado. Empero de ahí a que, probablemente, los mismos que criticaran los goles de Cristiano Ronaldo (de penalty) ensalcen ahora los de Parejo (de penalty)… ejem, ejem; más allá de reconocer la fiabilidad de Parejo como lanzador de penaltys. También hay que tener en cuenta que tira absolutamente todas las faltas y córners del VCF. Al final, las campañas de renovación patrocinadas por algunos… son contraproducentes. Ese penalty llegó gracias a un magnífico contraataque creado entre Zaza, Guedes -sin acierto cara a portería, cosido a patadas, decisivo- y Rodrigo… Antes un gran remate yendo al primer palo de Coquelin metió al Valencia en el partido. Desde que juega de delantero defendí a Rodrigo Moreno contra viento y marea, pero jamás imaginé que fuera a ser TAN JODIDAMENTE BUENO. Un excelente organizador a partir de 3/4 de campo… que se sigue desmarcando como dios. No me gustaría finalizar sin mostrar preocupación por las actuaciones de Soler, que si bien ha tenido momentos -escasos- brillantes desde su lesión… está muy por debajo del nivel de antes de la lesión. Y de valorar el notable partido de Murillo. Tres puntos de oro que acercan el objetivo de la Champions.

Lobo

Sensaciones encontradas otra vez. No se puede negar que el VCF ha bajado prestaciones, es tan evidente que este equipo ya no es el que comenzó que la cuasi tragedia del Insular casi se repitió en La Rosaleda. Aquél colista nos ganó, y el colista actual a punto estuvo de hacerlo también. El gol local anulado parece una broma tras el del LUD, pero si bien aquél fue claramente un error tremendo del trencilla, este ya es más discutible, aunque entiendo perfectamente el mosqueo de los boquerones, que de casi cerrar el partido han acabado sin puntos y hundidos en la miseria, todavía más.

Sin embargo el VCF haría mal en sacar pecho. Entiendo y comparto la alegría, pero durante muchos minutos, desde el enésimo gol encajado de centro lateral, creo que prácticamente todos temimos otra derrota bochornosa. Siendo sinceros creo que nadie sabe muy bien cómo conseguimos traernos los puntos. Ni por actitud ni juego los merecimos, y sólo el pundonor de unos pocos jugadores puede explicarlo. De entre todos hay que señalar a Coquelin. Empezó omnipresente y sin errores mientras todos a su alrededor fallaban continuamente, el único de pie enmedio del desastre. Luego bajó su despliegue y se desquició un tanto ante el naufragio general, pero al fin aprovechó uno de esos lanzamientos de esquina de Parejo que apenas si llegan al área, para cabecear a gol y de paso meter un petardo en el culo de sus compañeros que sirvió para que espabilaran a tiempo y consiguieran la jugada de la victoria in extremis. Qué jugador para lo que costó!

Sea como sea estos puntos van a significar mucho. La plantilla necesitaba creer, darse un alegrón ganando lejos de casa aunque fuera con dudas. Esta victoria probablemente no muy merecida va a servir para mejorar mucho la psique colectiva, perjudicada por la presión, los malos resultados y algunos temas de manejo de vestuario que quizá, sólo quizá, Marce no ha llevado del todo bien o no ha sabido ponderar convenientemente. Pero ese es otro tema, mayormente especulativo, y hoy no toca, o no me apetece. Sigamos.

jamacuco

Hoy la suerte ha estado de nuestro lado. A pesar de un mal partido, el VCF ha conseguido vencer al Málaga, el colista de la categoría, en los minutos finales cuando todos augurábamos lo peor.

El equipo salió bien posicionado y con ambición en los primeros minutos del encuentro. Sin embargo poco a poco el Málaga fue comiéndole el terreno hasta casi no dejarle salir de su campo. No nos creaban peligro, pero una vez más, con muy poco nos hicieron gol, esta vez a balón parado desde el córner. Sería cuestión de ponerse a estudiar seriamente este tema, pues resulta desconcertante que los rivales puedan hacer gol teniendo un par de ocasiones. O ni eso. El Málaga salió a por todas, pero su delantera (y el resto del equipo) es muy flojo. Como no ocurre puntualmente, si no que se trata de algo bastante habitual (12 partidos consecutivos encajando gol ya sea contra líderes como contra colistas), creo que  deberían subsanarlo cuanto antes o lo pasaremos apurado para aguantar una posición Champions. Ahora con Murillo parece que será más fácil, sin duda, viendo el nivel de concentración que tiene en los partidos. Sobrio y sin florituras, Murillo es un defensa contundente y seguro, además tiene una apreciable calidad al corte y es expeditivo en el salto.

El gol en contra no espoleó al VCF, más bien al contrario. La falta de ideas en ataque cuando falta Rodrigo es alarmante. Vietto, Mina y Parejo se mostraron muy obtusos en la creación, como suele ser habitual, desgraciadamente. Y Guedes (junto a Gayà) y Soler (y Vezo) por bandas lo intentaban pero sin mucho éxito.

No se entiende la ausencia de Rodrigo y Zaza desde el inicio. La pareja goleadora que funcionaba a las mil maravillas ha sido arrinconada en los últimos partidos y el VCF lo nota. Por ahora la aportación de Vietto es muy deficiente y Mina parece más un jugador revulsivo que inicial. Veremos que hace Marcelino en los próximos partidos en los que no hay tanta acumulación de encuentros.

La segunda parte comenzó igual. Incluso hubo gol anulado al Málaga por falta. Hasta que no saltó al campo la pareja de delanteros más goleadora el VCF no reaccionó. A falta de 10 minutos para el pitido inicial, un cabezazo de Coquelin (buen partido el suyo una vez más, con garra e intensidad, sintiendo la camiseta como si estuviera aquí desde juvenil) y un maravilloso pase en profundidad y entre líneas de Guedes a Rodrigo que acabó en penalty transformado por el capitán, decantaron el partido de nuestro lado. Uff… nos libramos.

El VCF  parece haber vuelto a la senda de las victorias, aunque sean sufridas como las dos últimas. Si consiguiera Marcelino ajustar alguna cosilla por el centro del campo, la defensa de centros laterales (sobre todo a balón parado) y la eficacia goleadora, nos ahorrarían unas cuantas horas de «patiment» de aquí hasta el final de temporada.

Jomi Lavarías

Horroroso partido el jugado anoche en La Rosaleda pero tres puntos importantísimos los obtenidos con una buena dosis de fortuna. Y es que hemos vuelto a la senda de las victorias, no por el buen juego, si no porque los pequeños detalles están cayendo de nuestro lado, del mismo modo que en anteriores partidos que caían de parte del rival.

El comienzo del partido fue esperanzador. Pero pronto, muy pronto se diluyó y volvimos a ver el Valencia plano y ramplón que hemos estado padeciendo durante buena parte del último mes y medio de competición. Tan solo Coquelin y Murillo supieron mantener el tipo, aguantar al equipo y que el Málaga no consiguiera poner más tierra de por medio que ya hubiera sido insalvable. Decepcionante primera parte y más decepcionante aún la segunda viendo que el equipo no reaccionaba y era incapaz de imponer su ley en el campo del, por lo visto ayer, muy merecido colista. Y es que el Málaga evidenció el por qué es el último clasificado, lo cual no hizo más que acentuar las vergüenzas del Valencia en tierra santa.

Menos mal que Marcelino optó por sacar a la vez a Rodrigo-Zaza por dos inoperantes Vietto-Mina y al equipo le cambió la cara. Rodrigo le dio otro aire (para mí incomprensible que no sea titular) y Zaza al menos dio más sensación de peligro y así llegó el empate de Coquelin tras un córner y la maravillosa asistencia  de un bastante mas entonado Guedes, el pataleado Guedes, a Rodrigo que supuso el penalti que Parejo convirtió en el 1-2. Por cierto, los últimos minutos contra un rival con 10 futbolistas, fueron infames, dando vida a un Málaga muerto que a punto estuvo de empatar en la última jugada con el cabezazo de su portero tras unas tontas manos del ayer atontado Gayá.

En definitiva, tres puntos muy valiosos en uno de esos campos donde se logran los objetivos. Y donde tambien se pierden, y el Valencia a puntito estuvo de cagarla. Hay que mejorar mucho si queremos entrar en Champions.

Amunt!!

Ilustración del artículo vía diariosur.es