ATA 4 – VCF 1 | Maldito San Siro

Jomi Lavarías

Debacle en San Siro. Maldito San Siro. Lamentable partido, una vez más fuera de casa, del Valencia. Ahora sí, se puede decir que este equipo se ha caído. Con las bajas que arrastras partido tras partido, de jugadores muy importantes, es cierto, pero ni así puedes dar la imagen de equipo endeble atrás e inofensivo arriba que se ha mostrado hoy a toda Europa. Entrenador y jugadores incapaces de sacar esto adelante. Todo apuntaba, viendo los precedentes de unos y otros, que el Atalanta nos iba a freir a ocasiones y goles. Se han juntado el hambre con las ganas de comer. Uno de los equipos mas goleadores de Europa contra otro que los encaja con una facilidad pasmosa. Cuando se realizó el sorteo todo eran risas y jolgorio. Cuando se iba aproximando la fecha del partido se nos iba borrando la sonrisa de la boca, viendo a un Atalanta con un caudal ofensivo impresionante y a un Valencia que fuera de casa es una puta lágrima. A todo ello unámosle, con el 4-0 en el marcador, la incapacidad de meter goles marrando ocasiones clarísimas. En las primera parte ya se fallan tres, pero lo de la segunda clama al cielo. Así es imposible. Eliminatoria, para mí, sentenciada. Ojalá me equivoque. Y en cuartos de final veremos y comprobaremos qué clase de equipo es la Atalanta y nos lamentaremos de la oportunidad perdida. Al tiempo. Resultado/eliminatoria para pensar y reflexionar. Y muy probablemente para que hayan consecuencias y no solo deportivas. Desgraciadamente en muy pocas más como esta, el hecho de jugar unos octavos de Champions, se verá la propiedad. Y muy posiblemente alguien se canse de esto. No me extrañaría que a partir de este momento se busque alguna alternativa seria a Meriton.

Lobo

Pues se acabó. No cabe pensar en reamuntadas ni historias, el VCF tenía que salir vivo de Milán ante el rival asequible que parecía el Atalanta, y salió trasquilado, casi humillado. Y ahora la UCL está en chino (cedo el chiste a los luchadores contra la represión de los putos chinos, gratis). La explicación a este dislate es hasta fácil. Un equipo con dudas, tantas bajas y que encaja goles con excesiva facilidad, tenía que salir a aguantar, especular, ponerlo difícil, embarullar el partido, echarle oficio e impedir las alegrías atacantes de los italianos, que, en realidad, tienen poco más que empuje (ya es), para aprovechar alguna oportunidad suelta o al menos volver a Valencia dentro de la eliminatoria y jugártela en casa ante los tuyos. En vez de eso salieron a un correcalles sin sentido, una apuesta peligrosísima que, en efecto, supuso un batacazo en cierto modo lógico ante unos italianos acostumbrados a golear. Una mala decisión que está en el debe de Celades. Él mejor que nadie debía saber que ahora mismo su equipo es inofensivo en ataque, muy inconsistente en medio campo y, sin tus centrales de referencia, extremadamente débil en defensa. En otras circunstancias aún podría entenderse el salir a por todas, pero en las actuales fue una locura. Y la pagamos carísima. Y nos merecemos el hostión. Y no tengo más ganas de escribir. Me da igual que falláramos lo increíble, que el Atalanta metiera casi todo lo que chutaron y los nuestros fallaran goles hechos. No me vale. Si no somos fuertes, si no estamos bien, si el equipo está cogido con alfileres y medio caído, al menos queda ser inteligentes. Pero si nos comportamos como auténticos idiotas, con una temeridad que roza la irresponsabilidad, lo normal es que nos den una hostia, y hale, a casa, a llorar de frustración. Porque, oye, que nos ganen porque son mejores, vale, pero que nos goleen por hacer el gilipollas, pues joder, duele. Qué impotencia.

Peris

Moltes preguntes al cap. Per què el Valencia CF presenta dos cares en molts partits? És l’equip un reflexe de l’entrenador en la debilitat? Si ens quedem amb el tram final del partit, amb Ferran apunyalant i plorant llastimosament les clamoroses oportunitats errades pel killer Gómez, se’ns obrin moltes més preguntes. És significatiu què, en un partit fora de casa d’eliminatòria europea te’n tornes a casa sense cap targeta? El plantejar un partit obert, sobre todo en la primera part, davant un equip que és un riu d’ofensivitat, és una temeritat o una necessitat front a les absències? Fotre, tot el que podia eixir bé, no va eixir. Tot el que podia eixir mal, va eixir. I inclús un dels millors de la temporada com és Gayà, va estar defensivament deficient. Però, per obrir l’esperança, en un partit roín en línies generals, va poder el Valencia CF marcar quatre. En tres setmanes, la solució.

jamacuco

«Ha sido una mierda todo«. Así declaraba Paulista, hoy ausente por sanción, después del partido contra el Getafe. Hoy se puede decir lo mismo, pero con otras matizaciones. Como también ocurrió en Mallorca o en Arabia. Esto nos indica que ESTE NO ES EL CAMINO. Celades, te lo repito, ESTE NO ES EL CAMINO. Ha habido una jugada clave, alrededor del minuto 60. El VCF acababa de recibir el 3-0, y Maxi Gómez de forma incomprensible falla delante del portero, solo, en el área pequeña, tras un rápido robo de Ferran. Unos minutos después el Atalanta hace el 4-0. Y es que en alta competición es CLAVE el acierto, tanto a la hora de materializar como en defensa. Celades no ha estado inteligente. Para nada. Posiblemente es su peor partido, su peor planteamiento. No puedes plantear el partido, faltándote tu defensa titular, de la forma más favorable al rival que es hiperatacante. La falta de intensidad del centro del campo, juegue quien juegue ya es una constante: sin presión, sin faltas, sin garra, con excesiva lentitud, con pasividad en la frontal del área, es imposible tener controlado a los rivales y mucho menos si su fuerte es el ataque a lo loco. Si encima tu buen juego de combinación en ataque al final es fallido cara a puerta, ocurre lo que ocurre. No sé qué ocurrirá con Celades, pero o cambia y mucho el nivel de intensidad en el centro del campo que es la clave o su tiempo en Valencia será muy limitado. Yo te creía más listo, Albert… Hemos pasado de la horrible barraca del tío Marcelino al coño de la Bernarda. Y eso, en ningún equipo, por muy ofensivo que sea, se lo puede permitir. Intensidad y garra, Albert. Fuerza y pundonor, Celades. Si no estás fuera. Ah… y lo de ciertos jugadores que juegan siempre, en cualquier circunstancia, ¿hasta cuándo? Amunt!!