KRA 1 – VCF 1 | Desde Rusia con pavor

Sergi Calvo

El fuego quema.

Mintió Marcelino, aunque en realidad nadie se creía sus palabras en rueda de prensa cuando dijo aquello de que “No vamos a salir al 0-0 sino a ganar el partido”. No es cierto, el Valencia planteó el partido a contemporizar, a aguantar, a enfriar y dejar que la eliminatoria fuera superada por puntos. Un planteamiento que ha recordado mucho al planteamiento del Betis, con una diferencia, contra los sevillanos, en una jugada marcaste un gol y el panorama se limpió, aunque no se varió ni un milímetro el guión. Hoy, en Rusia, no.

Dio la sensac

GUEDES
GUEDES
GUEDES
GUEDES
GUEDES
GUEDES
GUEDES

GAMEIRO
GAMEIRO

GAMEIRO
GAMEIRO
GAMEIRO

GUEDES
GUEDES
GUEDES
GUEDES
GUEDES
GUEDES

Jomi Lavarías

¿Es necesario pasar por esto? ¿Es necesario salir a verlas venir cuando tienes potencial para todo lo contrario? ¿Es necesario dejar de inicio en el banquillo a tus mejores hombres y no salir a por el partido? ¿Es necesario estar jugando en el alambre todo el partido contra una medio banda? ¿Es necesario clasificarte en el último minuto cuando has tenido noventa para finiquitar el partido y no pasar estas penurias? De verdad, ¿es necesario?

Feliz y contento por una milagrosa clasificación para cuartos, pero me deja un sabor demasiado agridulce.

Amunt.

Peris

Quina manera de patir. Les quatre primeres paraules són les mateixes que van començar la crònica del partit de Girona. Però res a vore. Plantejament pobre, amb un despreci a la pilota i la possessió que presagiava la tragèdia i la llei no escrita que si alguna cosa li pot passar al Valencia CF, li passarà. I tant que li va passar. I damunt amb un golàs de Suleymanov a cinc minuts d’acabar el partit. En eixe moment, els telèfons tiraven fum. Tothom veia el que finalment semblava que anava a passar. Servidor s’imaginava en la seua falla Les Barraques vagant pels racons, amb la mirada perduda i mussitant ‘El Krasnodar, ens ha tirat el Krasnodar’.

Pero Marcelino va traure a Gameiro. Abans havia tret a Guedes que semblava estar per estar. Gameiro, que en l’anada va fallar un gol a boca de porteria que haguera canviat la història del partit d’anada i estalviat moltes canes i guanyar en salut, va rebre, a 30 segons dels tres minuts d’afegit, a la vora dreta, arribant a línia de fons, alçant el cap el justet per vore a Guedes. El veu i el portugués, parant el temps, posa la pausa on és més difícil, fa una finta estratosfèrica i marca l’empat provocant el crit més bonic de futbol, tots a una veu.

Classificats, sí. Però amb mal joc, amb una exigència pobra. I el aficionat honrat pensa que estar demà al bombo és un poc injust. Però, collons, la sort també juga i, de moment, està de cara.

Falles, Getafe i a seguir.

jamacuco

Tremendo gol en el 93. Poco se está hablando de ello. Una delicatessen cocinada por Gameiro que recibió de Cheryshev en la banda derecha, se fue con velocidad y técnica de su rival, marcando perfectamente los tiempos en el avance con el balón, para internarse en el área, levantar la cabeza y ponersela a Gonçalo Guedes que la tenía para empomarla, pero que decidió (como hacen los grandes) hacer un amago de chut y posterior regate para, esta vez sí, ponerla fuerte y rasa junto el palo, haciendo inútil el esfuerzo de dos defensores a la desesperada y un portero que solo pudo verla entrar. Una maravilla de gol. Ambrosía y néctar de dioses.

Pero…¿por qué Marcelino con su rácano sistema nos castiga a los aficionados con estos partidos de taquicardia y mala leche creciente? ¿Por qué impone su visión tacticista, su perenne peregrinar por el alambre del resultadismo, a unos jugadores que cuando se desatan pueden plantar cara a cualquier equipo del planeta fútbol? ¿En serio tiene que ser así, o es la cabezonería del técnico que impone su unívoca visión del partido (según se desprende de sus ruedas de prensa monotemáticas) despreciando el talento que tiene sobre el campo, banquillo y grada?

Como se suele decir, bien está lo que bien acaba. Y vamos camino de hacer algo muy grande, o de dejarnos con la miel en los labios por la obtusa dirección de Marcelino García Toral. Veremos en los próximos y decisivos partidos cómo se comportan sus pupilos. Lo que es prácticamente seguro es que vamos a sufrir como condenados a galeras.

Pero bueno… mientras tanto … Amunt Valencia!! aunque sea en el descuento!!

Ilustración del artículo vía www.valenciacf.com