Jomi Lavarías
¿Quién lo iba a decir? ¿Quién lo iba a decir, joder? Nos hemos plantado en la final de Copa, a un solo partido de ganar otro título, después de todo lo que hemos pasado. Orgullo, no siento otra cosa en estos momentos, una alegría enorme.
En un partido muy trabado en la primera parte, donde el fútbol brilló por su ausencia y ahí es donde salen a relucir los destellos de los grandes jugadores y Guedes, en un zapatazo brutal desde fuera del área, colocaba el 1-0 que a la postre sería definitivo.
En la segunda parte el equipo defendió con seriedad el marcador. Con seriedad y oficio, ese oficio que tanto demandaba Bordalás. Estaba ahí, escondido, pero este equipo con el ADN Bordalás demostró que sí tiene oficio. Anuló por completo al Athletic. Por momentos lo desquició. Y el Valencia está en Sevilla. Por garra, por coraje, por pundonor, contra todo y contra todos. Pero somos el Valencia y nadie, jamás, debe darnos por muertos.
Hoy vuelvo a acordarme de mis padres, porque ellos vivieron momentos como éste. Y gracias a ellos yo puedo vivirlos ahora porque me insuflaron valencianismo en vena. No hay nada más grande que ser valencianista.
Y me acuerdo de nuestro JF, nuestro Arias que a bien seguro, allá donde esté, estará disfrutando de ver a su equipo en otra final. Aunque imagino que no habrá visto el partido, se habrá ido a dormir y ya mañana se enterará de esta nueva gesta de los suyos. Pues sí, tío, estamos en Sevilla otra vez.
Amunt 4ever.
Lobo
Noche mágica en Mestalla, de las que se recuerdan pasado mucho tiempo. En un ambiente precioso, ruidoso, multicolor, festivo e intimidante para el rival como hacía tiempo no veíamos, el VCF selló el pase a la final de Copa a lo Benitez. Una victoria sustentada en una enorme solidez defensiva, algún paradón de su portero y un gol, golazo con todas las letras, de Gonzalo Guedes. Y sanseacabó. El ATB lo intentó en la primera, con algunas llegadas peligrosas, y la segunda ya sin profundidad, y aunque tuvo mucho el balón apenas pudo inquietar a un soberbio Giorgi Mamardashvili, arropado de maravilla por sus tres centrales y el trabajo encomiable del resto del equipo. Y como en aquellos tiempos, el VCF no tuvo brillantez más que en algún chispazo, pero sí autoridad y confianza en sí mismo, remando todos con fuerza y determinación para pasar por encima de los leones y el propio árbitro, que, como es costumbre, midió con diferente vara a unos y otros, siendo el VCF, siempre, el perjudicado en el goteo constante de faltitas y tarjetitas.
Hay que destacar a Pepe Bordalás. Un entrenador como la copa de un pino que sabe sacar partido a lo que tiene sin quejarse ni enmerdar, y usar las armas a su alcance para competir. No siempre consigue que sus jugadores tengan la motivación y convicción necesarias, sobre todo en partidos de menos relumbrón que una semifinal, pero es un mal endémico de nuestro VCF del que no podemos hacerle culpable y que, supongo, debe estar intentando corregir a marchas forzadas. Partidos y eliminatorias como las de anoche deben servir para que todos crean/creamos más en él y se consiga esa regularidad necesaria para escalar puestos en Liga, que tanta falta hace. Estamos en camino, y subidones como este pase a la final son un chute de autoestima y valencianismo en vena tanto para el cuerpo técnico, algo decaído a veces al comprobar lo difícil que es la plaza, la afición, frustrada por tanto sinsabor y perdida a veces en guerras interesadas, dirigidas y estériles, y para la propiedad, que haría bien en respaldar el trabajo del cuerpo técnico dándole más y mejores ‘herramientas’ para su trabajo. De cierto entorno no hablamos, que esos ya se sabe que están a otras cosas y subidones así casi que les vienen mal, como todos intuimos.
En fin, que sí, que lo conseguimos contra todo pronóstico y con todo y todos en contra. Que se jodan. Orgullo es poco. Qué feliz estaría @Arias4EVER. Y nos vamos a Sevilla, sí señor. Por mi parte intentaré estar como estuve en la copa del centenario, aunque lo haré sin mi bufanda talismán, que perdí ayer en la fiesta posterior. Me jode, pero bueno, no pasa nada, son cosas que pasan. Solo espero que alguien, un valencianista de corazón, la lleve al cuello con orgullo a partir de ahora.
AMUNT i a per la COPA!!!
Peris
Els diners i lo altre, per a les ocasions. I este Valencia CF que sembla que no disposa dels diners que calen per escalar a les posicions nobles de les competicions, ha demostrat que de lo altre, va ben servit. Una atmòsfera de les que feia temps que no es vivien i uns jugadors que van acabar desfets, cosa que no haurà impedit segur que la nit de celebració haja sigut llarga. No crec que cap valencianista present a Mestalla o davant de la televisió pensara que anava a ser fàcil. Bo, servidor sí. Però per ixe optimisme kamikaze que donen els anys, la vida o veges tu a saber. El cas és que amb un plantegament tàctic interessant però millorable, el Valencia CF va fer bo el lema que ha acompanyat el camí de la copa. ‘Bronco y copero’. Amb una comunió perfecta graderia-jugadors i un colp de moral positiva que permet afrontar tota la primavera amb futbol i només futbol al cap. Quan un equip descompensat no pot oferir recursos, només queda el pit, el sentir el ferro i córrer més que el contrari. O amb més trellat. I la victòria dona molta calor. La lliga, que no cal oblidar i el somni de poder arribar a les nou copes, la motivació que Bordalás, primera vegada que jugarà una final com a entrenador, ha de traslladar. El vestidor fa molt de temps que és el principal actiu del club. Cal reforçar-lo més encara. Peter, imagina’t amb una miqueta més de mànega ampla en matèria esportiva, el que seria la ciutat i l’equip.
La fotografía que ilustra el artículo es propiedad de www.valenciacf.com
Pero somos el Valencia y nadie, jamás, debe darnos por muertos…… Que grande.
Estos venían a pasear tras meter bastante mediaticamente desde todos los estamentos y se van con el rabo entre ls piernas.
Amunt!
Sempre!
Marcelino!!!!!!!!! Los de fútbol de regional os han dado un repaso. Háztelo mirar bien. Por favor.