Jomi Lavarías
Con las victorias ante el Sevilla y Barcelona llegó la tranquilidad a Mestalla. Hoy hemos vivido el partido más tranquilo de toda la temporada, con el equipo libre de presiones y la grada recuperando las constantes vitales y alejando los fantasmas de un posible descenso treinta años después de aquella fatídica temporada 85-86.
Es más que evidente que el equipo desde que lo cogió Ayestarán no hace mas que mejorar partido tras partido. Cada jornada el Valencia es mejor que la anterior. Hoy se ha visto buen fútbol. Presionando con orden y acompasados, defendiendo mucho mejor tanto en jugada como a balón parado, un centro de campo mucho más consistente que el que estábamos acostumbrados a ver y una delantera con movilidad. En definitiva, Ayestarán en el poco tiempo que lleva como máximo responsable ha conseguido que el equipo esté más trabajado, es innegable.
No es que hayamos tenido mucho rival en el ya salvado Eibar, pero ante otros rivales igual o más flojos, nunca dimos la talla este año. Muy destacable que, al fin, Paco Alcácer haya visto puerta, y una gran banda derecha con unos puñales llamados Rodrigo y Cancelo. El cuarto gol fabricado por ambos es una auténtica delicia. Y creo que todos nos alegramos mucho que Rodrigo esté mostrando una cara más acorde a lo que todos esperábamos.
Pero aquí nadie olvida ni perdona los errores cometidos en este esperpéntico año. O no deberíamos, ya que por mucho que nos quejáramos y jurarámos que una vez el equipo se salvara exigiríamos responsabilidades tanto a la propiedad por sus malas decisiones como a los futbolistas por su nula actitud (tras el partido algunos en rueda de prensa han reconocido que han mejorado en la actitud e intensidad) y aptitud, hoy hayamos visto a Mestalla hacer la ola y ovacionar puestos en pie a los futbolistas sustituidos. Me ha parecido, disculpadme, lamentable. ¿Esta es la exigencia que queremos para con nuestro Valencia?
Drakul
¡Pako quedate! No, en serio, este Valencia es irreconocible. No sé si será por la pequeña y primaveral pretemporada, por un calendario menos denso o por los ajustes tácticos de Ayestarán pero este equipo es otro. Abdennour, ya es la roca que se prometió con su fichaje. Parejo organiza, llega y toca con inteligencia y hasta Paco Alcacer ha tenido el premio del gol, ¡y por triplicado!, que sí venía mereciendo. Cancelo y Rodrigo han mutado en los GlobeTrotters del Valencia, salpicando de de fantasía y calidad la banda derecha.
Nos va a tocar debatir sobre la continuidad de Ayestarán. Ha resucitado a un equipo que estaba muerto y con él a sus mejores hombres. No es sencillo, al revés, es complicadísimo. Yo sigo pensando que el Valencia ha de fichar e iniciar proyecto con un entrenador de renombre pero si al final las cantidades económicas que nos pidan no nos permiten acceder a ese mercado, con Pako tenemos el puesto bien cubierto. De hecho, tal vez fuera el entrenador con mas apoyos en entorno y afición de los últimos diez años.
Lo bien cierto es que el Valencia hoy ha hecho el mejor partido de la temporada, ha conseguido el mejor balance de victorias seguidas y ha roto con la racha de 23 partidos encajando. Y hoy ha hecho todo ello con una superioridad tan abrumadora que hasta nos hubiera aburrido de no ser por la falta de costumbre.
Jamacuco
Partido plácido. El más tranquilo de la temporada, incluso con ratos de buen juego sobre todo en la primera parte y comienzo de la segunda, con una banda derecha (Cancelo-Rodrigo) espectacular, con un Alcácer batallador y (por fin!) goleador, y un centro del campo con un buen Parejo (sin presión suele mostrarse más), un André que intenta recuperar su mejor cara y un grandioso Javi Fuego… Qué sí, ya sé… que era el Eibar, un equipo apañadete con la temporada resuelta, que no es para hacer la ola…(Oh cielos…….)
Como aspectos interesantes a destacar del partido de ayer señalaría dos: el efecto Pako y el efecto Ola. Ambos pueden ser buenos pero, al mismo tiempo, pueden ser muy peligrosos.
El efecto Pako, o la reacción que ha provocado el técnico vasco. Pako Ayestarán está demostrando que está capacitado para entrenar en primera división. A día de hoy todo son parabienes: jugadores, prensa, afición, Suso…. Nadie puede negar que ha conseguido en un tiempo record azuzar a una plantilla acomodada y paralizada por el miedo y la desidia. Sin embargo la pregunta que se hace el entorno de «¿Pako vale o no vale?», creo que debería ser «¿Pako es lo que necesitamos para la próxima temporada o no?» Para ello necesitamos saber qué pretende el máximo accionista (¿hacia dónde vamos Sr. Lim?) y con qué herramientas se va a contar. Es posible que el VCF necesite el golpe de efecto (ante prensa, rivales y afición) de un entrenador de prestigio contrastado para relanzar el proyecto deportivo valencianista para los próximos años. Por contra, si van a hacer la apuesta de un entrenador con aspiraciones, dispuesto a dar el salto, blablabla…. sería más razonable apostar por Ayestarán, ya que conoce al club, el entorno y sus necesidades.
Más preocupante me parece el efecto Ola, es decir, que a imagen de lo que ocurrió ayer en Mestalla, los pequeños éxitos o satisfacciones que nos da o nos pueda dar el equipo en este final, tapen o justifiquen la nefasta temporada en todos los ámbitos (planificación, gestión, comunicación, jugadores…) y el giro copernicano que debe dar el club se vea reducido a simples toques de maquillaje.
Permaneceremos atentos a ambos efectos… y mientras tanto a soñar con pillar al séptimo clasificado. ¡¡Quién lo hubiera dicho hace unas semanas!!
Ilustración del artículo vía www.valenciacf.es
Uy sí, hacer la ola ha sido una negligencia después de toda esta temporada insalvable que nos han brindado pues significa que el aficionado se ha bajado los pantalones y traga con todo. Debería ir el aficionado a Mestalla a comer pipas e insultar y pedir dimisiones (y sobre todo ¡cabezas!) durante todas estas jornadas que restan aunque gane de goleada y juegue bien.
Por partes:
1. El Vcf, el fútbol en general es una afición, entretenimiento, que sí que nos encanta y no veas que bien te despiertas el día siguiente de ganar al Barcelona, pero es eso. Al estadio debe irse a ver a tu equipo y pasártelo bien.
2. La pésima temporada es imperdonable aunque entren en Europa. En la última jornada es cuando debería pitarse. El único juicio verdadero que puede hacer el aficionado es no renovar el pase la temporada que viene. No tiene otro poder sobre el club. Los pitos hacia Nuno nos condujeron a Gary.
3. Últimamente empiezo a intuir que tanto la prensa de Madrid, como la de Valencia y como el propio aficionado (supongo que ustedes no son periodistas) juzgan a detalle cada cosa que hace o deja de hacer Mestalla. Pero bueno, es que nos creemos todos más listos y más valencianistas que nadie?
Gracias Javier por expresar tu opinión.
Tú, como todos los valencianistas, expresas tu valencianismo como mejor crees conveniente. Y eso es magnífico. Y este es un buen lugar para hacerlo.
Somos una afición muy grande (en cuanto a número y en cuanto a intensidad) y eso implica que existe una gran cantidad de sensibilidades y formas de ver las cosas que ocurren en nuestro equipo.
En @cafemestalla no tenemos una línea editorial, sino que cada uno de nosotros piensa y se expresa de forma diferente. Todas las opiniones valen porque todas suman, al igual que la tuya. Somos valencianistas de corazón, sin cortapisas ni otro interés que el bien de nuestro equipo. Aquí nadie quiere ser más valencianista que nadie, ni adoctrinar, ni imponer.
Espero que sigas haciendo llegar tu opinión como lo has hecho esta vez. Eso es lo que se pretende en esta web: que el aficionado se exprese y reflexione sobre nuestro VCF, para que no solo en el campo, sino también en la masa social, seamos cada vez más fuertes.
Amunt.