OSA 3 – VCF 1 | Basta ya Lamentable partido del VCF en Osasuna, superado en todo momento por los locales y sin capacidad de respuesta fuera ni dentro. Así lo hemos visto

Jomi Lavarías

Como si de un maldición se tratara o una alineación de planetas, en este 102 año de nuestra historia, se han juntado los mayores sinvergüenzas tanto en el palco como en el banquillo, por no hablar tampoco de los que se visten de corto. Y uno es consecuencia del otro y consecuencia del otro. Es intolerable que, a día de hoy, Gracia I El Mártir siga sentándose en el banquillo. El peor entrenador y el más indecente de toda nuestra historia. Y la inacción de la propiedad, una vez más, pisoteando el escudo.

Un once inexplicable, un central del filial jugando de lateral en una pirueta rocambolesca para no poner a jugadores que no los ha traído el mártir, errores groseros en defensa, dos penaltis en un minuto, ocasiones falladas por Osasuna, paradas de Jaume… El partido ha acabado 3-1 y se puede decir que es, incluso, la mejor noticia de la tarde.

Quien se crea que estamos salvados, que vaya cogiendo sitio, porque los partidos que nos vienen contra rivales directos y contra equipos que se están jugando el título de liga, prometen emociones fuertes. Y siendo francos, el Valencia es el equipo de primera división que peor fútbol hace. El que menos trabajado está. Y la cosa asusta. Que tengamos suerte.

Difícil encontrar palabras para escribir la crónica de hoy.

Y tampoco hay demasiadas ganas de encontrarlas.

El Valencia salió a hacer su juego habitual, su plan establecido y reconocible durante toda la temporada: salió el Valencia a…  bueno… sí… a… salieron once. Se pusieron por ahí, en el campo… y a ver lo que pasa.

Y claro, pasa que te pintan la cara. Una tarde más, como todas las tardes, excepto que el partido sea por la noche, en ese caso, te pintan la cara por la noche.

Un bochorno insoportable. Una tortura inmerecida para una afición que asiste destrozada al espectáculo lamentable desde la entidad en todos sus estamentos.

Y lo peor es la burla constante a la que estamos siendo sometidos.

-“Hemos de seguir trabajando para mejorar y hacerlo bien el próximo partido”

-“Me gustaría continuar aquí la próxima temporada”

Ni puñetera Gracia.

Peris

El resultat és injust. Amb un poc més d’encert, Osasuna certifica la seua permanència amb una maneta o més. Afortunadament, Jaume n’ha parat més de les que han anat per dins que les que no, fins i tot un penal. Un drama. Gens de tensió, errors de benjamins i només les corregudes de Guedes i, hui, el joc de Kangin, donen peu a dedicar dos hores del dia de partit per a patir, renegar i resignar-se. I és només el reflexe de l’entrenador que porta una linia clara de rebentar la moral de jugadors i aficionats. Els malabarismes per no fer partícips als jugadors arribats al mercat de gener ja són sense cap vergonya. I és precís que la cartera i els informes tècnics tinguen ja candidats a la banqueta l’any que ve. Decepció d’entrenador. Que poc ens va durar aquelles alegries d’estiu.

jamacuco

Qué se acabe esto ya. Pero ya. Esto es inaguantable. Un equipo, el VCF, que posiblemente es el peor trabajado, peor entrenado y peor dirigido de toda la primera división, no va cara al aire y está en una espiral muy peligrosa. Tan sólo ciertos ramalazos de calidad de algunos jugadores han mantenido al equipo esta temporada, sobre todo en casa. Porque lo que es fuera de casa el VCF es un equipo infame. De lo peor visto en la historia.

No se entiende nada en este club. La actitud del entrenador, haciendo la recontra a la directiva, es muy poco profesional. Ha dilapidado la dignidad profesional que desprendía dadas las trabas puestas por esta infame dirección. Cuando se entrena poco y mal, es más fácil cometer errores groseros como los que partido tras partido comete esta lágrima de equipo. Si luego haces alineaciones muy cuestionables y no aprovechas a ciertos jugadores que tienes en la plantilla, ni sabes cambiar el rumbo de los partidos tácticamente, sin transmitir intensidad ni juego, todos los focos te apuntan directamente.

También los jugadores parecen descentrados, como si estuvieran salvados, como si lo que está pasando no fuera con ellos. Y nada de esto es cierto. Un poco más de orgullo y profesionalidad no nos vendría nada mal.

Qué decir de los directivos, de la dirección… infames. Ocultos, practicando la táctica del avestruz como siempre, sin dar la cara, llenándose de excusas cada vez que pueden para ocultar su incapacidad y mala fe. Una pesadilla sin fin.

Nos quedan 6 partidos, algunos de ellos verdaderas finales, como el próximo contra el Alavés. Ojalá se haga de tripas corazón y se saque esto adelante, porque parece que mucha gente, de muchos estamentos y de muchos sitios, estaría gustosa de que esto fuera cuanto peor, mejor.

Amunt!!

Lobo

Que Osasuna, uno a uno y en conjunto, te pase por encima en cuanto a actitud, ganas, presión y trabajo, hace que un equipo teóricamente de mucha menor calidad supere con comodidad a todo un VCF mostrando además mucha mayor calidad individual y colectiva. La plantilla es corta y joven, el proyecto en este año de Covid es paupérrimo, pero no excusa que un equipo tras otro pasen por encima de un VCF que siempre hace lo mismo, igual de mal y con la misma aparente desidia que les hace fallar continuamente y ser uno de los peores equipos del campeonato.

Lo de Pamplona esta noche ha sido un bochorno, uno más de tantos. Desde la alineación a la puesta en escena, pasando por la inacción y los errores mil veces repetidos a los que nadie pone remedio, y acabando con un equipo roto, superado y humillado que no sabe por dónde le sopla el viento.

De esto tiene la culpa Meriton por hacer esta plantilla tan mediocre y sobre todo por no tirar a patadas de una santísima vez al entrenador más inútil y desesperante que recuerdo, un elemento que se hartó de excusarse en la falta de refuerzos para no hacerles jugar cuando los tuvo. Un entrenador incapaz de sacar partido de algunos buenos jugafores que parecen sombras de sí mismo, un tipo que no trasmite más que depresión, falta de capacidad, ignorancia, desidia y últimamente una soberbia inaceptable que supone una humillación continua al club y su historia.

Me da igual todo ya, estoy tan acojonafo como cualquiera porque este grupo, con semejante falta de liderazgo y dirección técnica, es incapaz de ganar a nadie. Fuera Gracia ya por dios, que esto es insoportable y cada vez más peligroso.

La fotografía que ilustra el artículo es propiedad de www.valenciacf.com