Jomi Lavarías
Nueva derrota del Resbalones CF, en un partido blandengue protagonizado por dos equipos blandengues. Al final ganó el menos tonto de los dos. Los números empiezan ya a ser desastrosos y preocupantes. Siete puntos de dieciocho, por no hablar de la debilidad defensiva y los goles encajados en seis jornadas.
Y es que saliendo a incendio diario, donde quizás lo menos importante ya sea lo que ocurre en el terreno de juego porque parece que a nadie le importa, te lleva a estas cosas. En este deriva que nos lleva al abismo, donde todos los estamentos del club están absolutamente podridos, ya puestos, yo hoy no habría permitido a Gracia sentarse en el banquillo y Kondogbia estaría haciendo la mudanza hacia su nueva casa de Madrid. Porque lo que menos necesitamos en estos momentos, ya que los responsables de este desaguisado ni se van ni los puedes echar, es que algunos de tus activos deportivos (entrenador y jugador más importante) no quieran estar aquí. Se ha tenido tiempo para llegar a un acuerdo con ambos.
Dejados de la mano de Dios. Toca rezar, y mucho, porque este año pase rápido y sea lo menos lesivo para un club moribundo.
Amunt.
Ninguno de los males que aquejaban a nuestro Valencia (sí, nuestro Valencia, el mío y el suyo… el de todos) se ha atenuado en un parón de selecciones que lejos de resultar balsámico o curativo tras la derrota contra el Betis ha extendido la infección de la herida que llega ya hasta el tuétano.
Nada ayuda, ni las circunstancias ni los elementos que se están cebando con un equipo que, debilitado en extremo, está a merced de los golpes que vienen de allí dónde venga el viento del día.
Y no jugó mal (tampoco es que lo haya hecho bien) en Vila-Real pero el guión de la tragicomedia estaba cantado: Dos goles de dos ex jugadores, uno de penalti (Por cierto, el 400 en contra de nuestra historia, todos ellos o tontos o inexistentes) y otro del hace unos meses capitán del equipo con precisión milimétrica al larguero-gol.
Y nada de lo que hagas o dejes de hacer puede ahora doblar el junco. Nada.
El equipo puede más, es my cierto y evidente y, por cierto, también hay que exigirle más… pero también las circunstancias podrían ser más benignas… Dios aprieta pero no ahoga… salvo que seas del Valencia en 2020, claro.
Nadie ayuda.
Nada ayuda.
Pd. El cuñadismo ventajista es síntoma de lo que es.
Lobo
No he visto un Valencia roto, como esperaba tras el parón lleno de dramas e incendios de todos los colores. He visto un equipo romo, limitado y con dudas, demasiadas dudas, sin saber muy bien qué hacer pese a tener más o menos un plan, porque creo que falta confianza a todos los niveles, sobre todo entre los propios jugadores. Falta plantilla, es evidentísimo. Muchos jugadores apenas dan la talla, no están capacitados para seguir un orden táctico y a la vez mostrar su potencial. Eran precisos los refuerzos, lo sabemos todos, incluso los que no los permitieron, pero no llegaron y no llegarán, así que lamentarse sirve solo como derecho al pataleo. El VCF salió mal, con esas dudas que refiero, y tras el gol por resbalón, uno de tantos, de Paulista, costó un mundo entrar y estar en el partido. La segunda parte empezarón mucho mejor, entiendo que con los retoques y ánimos del entrenador, pero el puto gol de rebote del mierda de Parejo, que en su eterna carrera como valencianista no marcó uno ni parecido y aún así es ‘leyenda’, les volvió a sacar del campo. Los cambios, tardíos y que apenas mejoraron al equipo, fueron ya intrascendentes. Mal Gracia en la lectura final del partido, aunque en su defensa cabe decir que su banquillo es un solar. Y mención para lo de Kangin, que no se entiende salvo castigo por veter a saber.
Bueno, hemos perdido, ya está, pero como digo no he visto un equipo roto, ni superado, ni indolente. He visto dos equipos flojitos y ganó el que tuvo algo más de empuje y la suerte de un resbalón y un puto rebote del mierda de Parejo. Y esto debe servir para ver que como sea, con los que sea, se puede y se debe luchar, y poco a poco las cosas irán saliendo. Lo del mierda de Parejo que no ha perdido un solo balón ni marcó un gol similar en toda su puta vida con el Valencia ya lo había dicho, verdad? Cagonsusombra. Qué bien, qué felices estarán tantos valencianistas que están celebrando el gol y la derrota, imagino que ya os habréis dado cuenta. Hale pues, a disfrutar y restregarlo mucho, que es lo que mola.
Peris
Amb tants ex, era difícil que algun no marcara. I van marcar els dos que igual fan més mal en el valencianisme, Alcácer i Parejo. Dos eixides traumàtiques pròpies de les decisions incomprensibles de Meriton, una d’elles molt recient. Dos equips amb dos fulles de ruta molt diferents on només es pot arribar a bon port per la gestió professional dels jugadors i cos tècnic. Toca celebrar cada punt que faça l’equip com una xicoteta victòria perquè venen temps durs esportivament, conseqüència de la gestió que té un club amb 101 anys d’història. Amb un poquet més, el partit s’haguera guanyat, però no sembla haver més. I potser tenim un component més a esta tormenta perfecta patrocinada per la gestió esportiva de Meriton, Kang In no entra en les rotacions. L’únic que sembla, junt amb les aparicions guadianesques de Guedes, tindre elements diferencials.
Hoeman
El resultado final marca cualquier análisis: el Villarreal comenzó mejor y se encontró temprano con un penalty estúpido de Paulista. Gol de Alcácer. Dio la impresión de que al conjunto che le faltaba compactarse, que cada jugador iba un poco a su bola, que no había coordinación entre los futbolistas; aunque con el paso de los minutos el Valencia fue ganando en aplomo y llegó una genialidad de Guedes en forma de disparo imparable. Aún así, muchas cosas en las que mejorar. Por ejemplo:
– Muchas pérdidas que supusieron contraataques del Villarreal, con los jugadores arriba. Especialmente desacertado en este apartado Álex Blanco jugando por derecha (es zurdo cerrado).
– Poca fluidez en el juego con pelota y con escaso escalonamiento.
– Presión adelantada, cuando se intentó, inefectiva.
En la segunda parte el Valencia salió con mejor cara, mostrando cierta suficiencia, aunque con poco empuje y diría, ambición por marcar; como conformándose con tener el dominio (pírrico) de un partido de ritmo bajo. Llegó el gol de Parejo en una jugada afortunada para ellos, y ahí cambió el dominio en beneficio del Villarreal. Eché de menos cambios más tempranos de Gracia (Unai esta vez consiguió cambiar el desenlace con la entrada de Kubo y Coquelin) tras el mazazo recibido. Desde la distancia, resulta difícil entender el ostrascismo recibido por Kangin en el partido de hoy: es el que tiene más talento para «inventar» una jugada.
jamacuco
El VCF hace lo que puede dada la situación que unos ineptos dirigentes han creado. Este equipo no está para mucho más que pasar la temporada sin pena ni gloria, y casi sería un éxito. Con una buena cantidad de jugadores que ni en las peores épocas del club formarían parte de la plantilla del VCF ( alrededor de 10 jugadores no tienen un nivel adecuado a lo que es un nivel del VCF, unos por juventud otros por falta de calidad, otros por ambas cosas) los objetivos tienen que ser claramente la supervivencia. Partido a partido, sin pensar en pasado ni en futuro.
Gracia no ha estado bien en los cambios, sin embargo el planteamiento del partido y su replanteamiento en la segunda parte no han sido malos. El Villarreal, que sólo al principio ha apretado y ahogado a los valencianistas aunque sin ocasiones claras, a partir de los 30 minutos ha sido bastante igualado, haciendo un juego tosco pero que se le ha empezado a atragantar a los de Unai, algo parecido al partido en San Sebastián. Pero ahí está el problema, en mi opinión. En partidos igualados, trabados, con poco fútbol, los detalles cuentan tanto a favor como en contra. Has de optimizar al máximo los recursos. Y en eso no está siendo fino el VCF. Justo cuando mejor estaban los de Gracia ha venido un churrigol del Villarreal prácticamente en la única llegada grogueta de la segunda parte. Los cambios valencianistas llegaron muy tarde, y los últimos minutos de asedio a la meta castellonense, fueron de resultado infructuoso. Si no aprovechamos nuestros buenos minutos, normalmente nos superarán, porque nuestros malos minutos normalmente son decisivos en nuestra contra.
Lo mejor, el gol de Guedes. A ver si se anima. Lo peor, los resbalones (por favor, que revisen los tacos!!!) y que no conseguimos puntuar ante un Villarreal ligeramente superior, pero de juego discreto.
Desgraciadamente no nos queda otra que esperar que sigan trabajando, que sigan haciendo grupo, que sigan ensayando el balón parado que posiblemente nos arregle algún entuerto. El equipo no da para mucho más, aunque sí podría dar para mucho menos si no hay un mínimo de tranquilidad en el entorno, dado que desde la propiedad del club no la va a haber debido a su ineptitud y actitud soberbia.
No queda otra que apretar los dientes, aguantar y esperar momentos mejores.
Amunt!!
No estamos para echar el año a la basura, hombre.
Tampoco estamos para amputar.
El equipo no está roto, ni superado, ni indolente.
Kang In, si no entra en las rotaciones será por algo. No creo que hubiera sido la salvación.
Resbalones FC tampoco, creo, esta para luchar por la permanencia.
Señores, seamos positivos, por favor.
Per Españeta: ¡Amunt!.
Seamos positivos, pero también realistas!!!